"Los pescadores tendremos la última palabra sobre la instalación de la granja de acuicultura en La Azohía"

Cartagena

Tienen claro que no van a permitir la instalación en esa zona que además está protegida medioambientalmente. Mañana se reúnen en Mazarrón representantes de la Cofradía, con un representante de la empresa y el servicio de pesca de la Comunidad. "Nos sentaremos, hablaremos y la última palabra la tiene el sector pesquero" afirma el presidente Bartolomé Navarro y añade que "el sol sale para todos, pero uno tiene que trabajar sin perjudicar a otro. A mí me da igual que pongan jaulas de acuicultura porque tenemos en otras zonas, podemos convivir todos, porque el pescado que pescamos nosotros no tiene nada que ver con el de estas granjas. No se puede comparar un pescado salvaje con éste. Ahora, si estos señores cambian la ubicación los pescadores no nos vamos a oponer". La ubicación de estas jaulas de engorde choca directamente con la pesca tradicional de la gamba roja y la gamba blanca .

450 hectáreas o el ejemplo gráfico, más de 400 campos de fútbol. Esa sería la zona de impacto de esta granja de acuicultura, "¿estamos locos o qué? - dice Navarro -No podemos dejar que con todas las restricciones que tenemos en el sector y que nos impone la comisión europea, ponernos ahora este monstruo ahí".

El Ayuntamiento de Cartagena, el de Mazarrón, grupo municipales y organizaciones ecologistas se han posicionado en contra de esta instalación.

Falta mano de obra cualificada

Por otro lado, desde la Cofradía de Pescadores de Cartagena proponen la contratación de extranjeros que ya residan aquí. La falta de mano de obra en el sector primario es una realidad. Y, sobre todo, profesional cualificado. Desde el grupo municipal socialista se va a presentar en el Pleno una moción para la contratación en origen de personas migrantes, pero el presidente de la Cofradía, propone incorporar a extranjeros que ya residan aquí, por ejemplo, los que se encuentran "en el Hospital Naval. Hay mucha gente de Senegal que ha venido a la Cofradía a pedir trabajo porque son pescadores, pero claro, no tienen papeles. En el Naval hay mucha gente, así que por qué no preparar papeles, y hacerles un contrato de trabajo. No hay que traer, aunque no soy político, gente de fuera porque ya la tenemos aquí".

Senegaleses que conocen perfectamente el arte de la pesca que sufre la falta de relevo generacional. Nos contaba el presidente de la Cofradía que hay un concepto erróneo entre los jóvenes sobre el rédito que da una profesión como ésta porque "sí renta. Por ejemplo hemos tenido un barco pescando atún rojo de la base de Cartagena que ha hecho una marea de tres meses que ha estado entrando y saliendo. Y cada marinero se va a llevar 20.000 o 25.000 euros en tres meses. Dígame, ¿Quién gana eso en tierra?". Pese a todo, la realidad afirma Navarro, es que los jóvenes españoles no están interesados en esta profesión tan tradicional.

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