Torreciega exige justicia ambiental tras un año de silencio judicial

Cartagena

Un centenar de vecinos del barrio cartagenero de Torreciega se han concentrado esta mañana frente al Palacio de Justicia para denunciar el incumplimiento de las medidas cautelares dictadas hace un año por el Juzgado de Instrucción número 5. El auto judicial ordenaba, entre otras actuaciones, el sellado de las balsas tóxicas ubicadas en los terrenos de la antigua factoría de Española del Zinc, propiedad de la empresa Cartagena Parque S.A., vinculada al promotor Tomás Olivo.

La protesta, convocada por la Plataforma de Suelos Contaminados de Cartagena, y las asociaciones vecinales del barrio, pone de manifiesto "la decepción y preocupación" de los vecinos, que siguen conviviendo con un vertedero "lleno de ácidos y lixiviados, sin que se haya ejecutado ninguna medida efectiva más allá del vaciado parcial de dos balsas", explica Pedro Gálvez, portavoz de la Plataforma de Suelos Contaminados de Cartagena.

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Según el escrito presentado por estos vecinos, las balsas contienen metales pesados como plomo, cadmio, arsénico y zinc, en concentraciones que multiplican por 470 los límites de riesgo establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El riesgo para la salud pública es “inminente y grave”, especialmente para los niños, según informes periciales aportados a la causa.

Pedro Gálvez ha recordado que la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia tenía la obligación de sellar estas balsas desde 2009, y ha denunciado la “inacción dolosa” tanto del Gobierno regional como de la empresa propietaria. Si no se ejecutan las medidas cautelares, los vecinos están dispuestos a recurrir al Tribunal Superior de Justicia.

Entre los manifestantes se encontraba María Teresa, vecina de Torreciega durante más de dos décadas, que expresaba "el sentimiento de abandono" que comparten muchos residentes: “Queremos vivir sin contaminación, que el barrio esté limpio y que la gente sea feliz viviendo aquí".