Sandra, madre de una niña trans: "Apostamos por su felicidad, pero necesitamos que los centros educativos estén preparados"

Sandra forma parte de la asociación Chrysallis Región de Murcia y es madre de una niña trans de 12 años que realizó su tránsito a los 5. Su historia refleja los retos que afrontan las familias y la importancia de protocolos educativos para garantizar respeto y acompañamiento.

Ha pasado por La Ventana de la Cadena SER donde ha recordado que cuando su hija "inició su tránsito, el centro educativo fue empático, pero no tenía conocimientos". Ante la falta de formación, fue ella quien guio al profesorado en cada paso, por ejemplo "cómo presentar la situación al alumnado, cómo adaptar el trato y qué herramientas utilizar para que su hija se sintiera cómoda. Les propuse contar un cuento sobre la transexualidad, hablar con los compañeros y darles pautas para que todo fuera natural".

El proceso no fue sencillo, según explica: "Nos pidieron tiempo, y ese tiempo fue duro para mi hija porque ya quería que sus compañeros la llamaran por su nombre sentido y la reconocieran por su género". Con apoyo de 'Chrysallis' y profesionales, la familia apostó por la felicidad de la menor, sabiendo que no era un capricho, sino una necesidad vital.

Sandra incide en la importancia de protocolos claros en los centros educativos. En este sentido, señala que "cuando una familia comunica que tiene un hijo o hija trans, lo que necesita es que el colegio sepa cómo actuar, que tenga herramientas para acompañar y evitar cualquier rechazo". Para ella, la formación del profesorado es clave, "no se trata solo de empatía, sino de saber cómo proceder ante todas las situaciones posibles".

El miedo, admite, nunca desaparece. "Como madre, siempre tienes miedo a que la sociedad no acepte a tu hija. Antes estaba en primaria, ahora en secundaria, y cada etapa implica volver a explicar la situación y confiar en que la respeten".

Sandra Núñez cree necesario "acompañar, formar y apostar por la felicidad de los menores. Intento llevar a mi hija de la mano, sin ir por delante ni por detrás, simplemente estar ahí. Porque lo importante es que se sienta querida y respetada".

El portavoz del sindicato Sterm, Andrés Martínez, señala que la Región "es de las pocas de España que no tiene un protocolo establecido" a pesar de que lo recoge la ley. Añade que incluye medidas como "la formación del profesorado como el alumnado para que este viva conforme a su identidad".