El Real Madrid sepulta al Levante a Segunda
El conjunto granota se hunde en el Bernabéu y certifica matemáticamente su descenso a La Liga SmartBank con una dolorosa goleada (6-0)
El Levante se jugaba la vida. Le valía todo menos la derrota. Y perdió de forma estrepitosa. Con el agua al cuello, los granotas tenían que defender su primera bola por el descenso en el escenario más arduo, con el campeón enfrente y una nómina de jugadores insaciables dentro. Con la liga en la mano y la Champions en el horizonte, el segundo de los cuatro partidos de transición que le esperan al Real Madrid hasta la final de París del 28 de mayo, fue saldado con una goleada lapidaria, cruel y en clave Real Madrid, nada representativa, porque el 6-0 se quedó cortó. El Levante desciende a Segunda División a falta de dos jornadas con sólo 29 puntos en el casillero.
Más información
El Levante asiste impasible a su funeral
Ancelotti apostó ese círculo de rotaciones que mantengan encendida la mecha competitiva. Pero el Real Madrid, con ganas de gustarse frente a su gente, avivó la llama a costa del Levante. Los valencianos, que saltaron al Bernabéu haciendo el pasillo al campeón, se quedó atrapado en ese gesto de reverencia durante el resto del partido. El equipo de Alessio Lisci de las últimas semanas no saltó al campo. Saltó el Levante previo a su llegada: desdibujado, roto y desalmado. El día en el que se jugaba el ser o no ser, el Levante no fue. Simplemente asistió a su funeral con el peor enterrador delante.
Benzema aterrizó hambriento. Con ganas de igualar a Rául González como el segundo máximo goleador de la historia del club. Y cuando el pichichi quiere, no hay equipo que lo detenga. El francés cazó los 323 goles del mítico canterano cabeceando en el segundo palo el 2-0. El capitán, activadísimo desde el arranque, asistió a cómo Mendy pegaba el primer puñetazo al Levante en el minuto 12. El lateral llegó al área rompiendo la espalda de una zaga, que a partir del primero, quedaría retratada jugada a jugada. El pase, un exterior de escuadra y cartabón, sería la primera de sus tres asistencias.
El Real Madrid vio la sangre, olió el miedo y mató en el primer tiempo. Rodrygo puso el 3-0 y Vinicius el 4-0, ambos asistidos por Modric. No se pudo sumar a la fiesta Valverde, aunque bien que lo intentó con tres zapatos al palo. En un Levante totalmente superado por la situación y devorado por el entorno, sólo Cárdenas asitió con dignidad para evitar una goleada aún más sonrojante. Ni un doble cambio en el primer tiempo ni un atisbo de rebeldía o intensidad . Brazos caídos para asistir al desastre de la forma más dolorosa posible.
El Real Madrid tiró de piedad y bajó las revoluciones al partido acomodado en su gigantesca renta. Pero la magia de Benzema no descansa. El delantero sacó la varita a falta de 20 minutos. Recibió frente a Cárdenas y jugó con él tirando de amagues y contoneos con el cuerpo, escondiendo el balón sin tocarlo hasta tumbar al meta granota y dejar así el doblete en bandeja a Vinicius. El brasileño, agradiado y agigantado, luchó hasta firmar su primer hat-trick como jugador del Real Madrid. Encaró y definió con facilidad en la máxima representación de la nueva dimensión a la que ha aterrizado esta temporada. 21 goles. Y en el marcador, un 6-0 desgarrador para un Levante que ya es de Segunda División.
Juan Antonio Requena
Estudiante de periodismo. Antes en Diario AS....