Biden hace un llamamiento a "rechazar el veneno de la supremacía blanca" tras el tiroteo racista de Buffalo
El presidente de Estados Unidos se ha desplazado hasta la ciudad donde se produjo el ataque que terminó con la vida de 10 personas, desde donde ha reconocido que "será difícil implementar más medidas de control de armas desde el Congreso"
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha pedido este martes a todos los estadounidenses que rechacen el "veneno de la supremacía blanca", dirigiéndose a familias y funcionarios locales en Buffalo, Nueva York, lugar donde se produjo un tiroteo masivo por parte de un hombre blanco racista de 18 años durante el fin de semana.
"La supremacía blanca es un veneno. Realmente lo es. Es un veneno que atraviesa nuestro cuerpo político", apuntó Biden. Además, añadió que el autor de los asesinatos de nueve estadounidenses negros y de un guardia de seguridad blanco estaba alimentado por el odio.
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Así, el presidente demócrata fue más allá y declaró que ese odio "ha radicalizado a individuos enfadados, alienados, perdidos y aislados, a través de Internet, los medios y la política, haciéndoles creer falsamente que serán reemplazados por personas que no se parecen a ellos".
A continuación, ha señalado que "En Estados Unidos, el demonio no ganará, os lo prometo. El odio no prevalecerá. La supremacía blanca no tendrá la última palabra", quién además ha incidido en que "el mal llegó a Búfalo y ha llegado a demasiados lugares, manifestado en hombres armados que masacraron personas inocentes en nombre de una ideología odiosa y perversa".
Además, Biden ha lamentado que su capacidad política para avanzar en materia de leyes hacia la modificación de la normativa de armas, y ha reconocido que "será difícil implementar más medidas de control de armas desde el Congreso".
El autor del tiroteo, Payton S. Gendron, que había sido definido previamente como un supremacista blanco y ya planeó un tiroteo en su instituto, era un firme defensor de la idea del gran reemplazo, instaurada en la mayoría de partidos de extrema derecha como Vox o el francés Eric Zemmour. Esta teoría asegura que las ONGs y la izquierda, con la connivencia de elites liberales, quieren sustituir a la población blanca y europea por personas procedentes de otros continentes. En la práctica - según esta teoría de la conspiración - se pretende sustituir a los europeos por africanos, porque son más sumisos y trabajan más.