El Banco de España calcula que la suspensión total del comercio con Rusia reduciría un 1,8% el PIB de España

Madrid

Una hipotética interrupción total de las relaciones comerciales entre la Unión Europea y Rusia frenaría casi dos puntos el crecimiento de la economía española y elevaría la inflación 1,5 puntos. Esos son los cálculos que ha publicado el Banco de España tras analizar las posibles consecuencias que tendría este escenario que, por ahora, no se ha producido y no entra en los supuestos de la mayoría de economistas. El impacto sería considerable para España, aunque las consecuencias serían el doble de severas en la media europea y en países como Italia o Alemania.

El Banco de España cree que la economía española y las del resto de Europa serían capaces de adaptarse a la interrupción total de relaciones económicas con Rusia a medio plazo, pero asume que se necesitarán algunos meses para esta transición, lo que afectaría tanto al ritmo de crecimiento de la economía como a la subida de los precios. Esa suspensión de relaciones supondría una reducción notable de la oferta disponible de energía y eso afectaría a la capacidad de producción de la economía y encarecería los costes para las empresas.

En el caso de España, el impacto más probable sería de una reducción de 1,8 puntos del PIB español y un incremento de la inflación de 1,4 puntos durante el primer año sin relaciones comerciales con Rusia. A partir del segundo año las consecuencias económicas irían disminuyendo.

Las consecuencias de esta hipotética ruptura de toda relación comercial entre la Unión Europea y Rusia serían mayores para países como Alemania o Italia que tienen una mayor dependencia de las importaciones rusas. España sería de los menos afectados. Los cálculos del Banco de España apuntan a que el PIB de Italia y de Alemania podría reducirse más de un 4% y la media europea superaría incluso los 5 puntos de afectación.

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Impacto de la suspensión de importaciones energéticas

"Las materias primas energéticas procedentes de Rusia son los productos cuya restricción de importaciones podría tener un mayor impacto sobre la actividad y los precios de las economías europeas" dice este artículo del Banco de España. De hecho, sus cálculos apuntan a que la energía sería responsable de dos terceras partes del impacto de esa hipotética suspensión de las importaciones con Rusia. Justo esta madrugada, la Unión Europea ha avanzado en un acuerdo para suspender parcialmente las importaciones de petróleo ruso.

En el caso de España, solo cerrar las importaciones energéticas desde Rusia (gas, petróleo y minería) implicaría una caída del PIB de 1,1 puntos en el escenario más probable. Aunque los economistas que firman el artículo apuntan que en el peor de los casos esa caída podría ser de hasta 1,4 puntos. Y la inflación subiría 9 décimas más de lo calculado.

No obstante, el artículo recuerda que, el menor grado de dependencia energética de productos rusos permitirá que los efectos de la suspensión de importaciones sobre la economía española fueran mucho más reducidas que en otras economías europeas.