'Los aires difíciles', una novela sobre la supervivencia

Almudena Grandes nació en Madrid en 1960 y murió el 27 de noviembre de 2021. Ha sido una escritora extraordinaria, comprometida, necesaria. Es la autora, entre otros, de 'Las edades de Lulú', 'Malena es un nombre de tango', 'Atlas de geografía humana', 'El corazón helado', que ya os hemos contado en 'Un libro una hora' y de la extraordinaria serie 'Episodios de una guerra interminable', que deja inacabada. Hay que leer a Almudena Grandes. Ahora más que nunca.

'Los aires difíciles' se publicó en 2002. Es una extraordinaria novela, magníficamente construida, con unos personajes inolvidables, llena de emoción, de deseo, de pérdida y de esperanza. Reproducimos aquí parte de la intervención de Almudena Grandes en la entrevista que le hizo Iñaki Gabilondo en 'Hoy por Hoy' el 18 de febrero de 2002.

"Si yo no soy capaz de emocionarme a mí misma (...) luego no voy a ser capaz de convencer a nadie"

"Cuando escribo una novela procuro escribir para un lector que soy yo. Para la lectora que yo soy. Procuro ponerme en la posición del lector, porque yo creo que si yo no soy capaz de emocionarme a mí misma, si no soy capaz de convencerme a mí misma, luego no voy a ser capaz de convencer a nadie ni de emocionar a nadie. Vivo mucho la novela y me enfado con los personajes y me pongo de su parte. Escribir una novela es como vivir en otra casa. La novela para mí es como tener otra vida paralela, como estar en un mundo paralelo. Es una especie de esquizofrenia controlada. Por eso también a mí me da pena acabar las novelas. Es una sensación agridulce, porque por un lado he podido con ellas. Porque una novela hasta que no la terminas, siempre es posible que pueda contigo. Pero por otro lado, me siento desahuciada. Me siento como sin sitio, como si… fuera del lugar donde he vivido”.

"En 'Los aires difíciles' reaparece, pero de una forma central, un tema que a mí siempre me ha interesado y sobre el que yo he escrito mucho, que es la supervivencia. Y en cierto sentido aquí es supervivencia en sentido estricto, porque tanto Sara como Juan como los otros personajes, son personas que no han tenido suerte. Que tienen que aprender, que intentan huir de la infelicidad. Yo diría que al principio de la novela son como náufragos arrojados a una playa. Son personajes desahuciados y entre todos construyen una cabaña que es donde van a pasar el resto de su vida".

El fenómeno "fascinante" sobre el que escribió Almudena Grandes

“Los vientos en la bahía de Cádiz son una cosa muy singular. Yo desde que llegué a Cádiz y empecé a oír hablar a la gente y a comprobar cómo el viento determinaba su vida, supe que antes o después escribiría sobre eso, porque es un fenómeno fascinante. Tiene mucho más que ver con la mitología. Es una relación como pagana, como con una divinidad clásica, la que tiene la gente con los vientos. […] En ese paraíso puede haber por debajo un infierno larvado que es el viento. Todo lo que ocurre, ocurre con el permiso del viento. Y a mis personajes les pasa lo mismo. Son personas apacibles, serenas. Personas moralmente sostenibles y comprensibles que sin embargo tienen un infierno dentro”.

“Las cosas son como son y son porque sí. Y precisamente por eso, a lo largo de la novela, que es una novela que no llega a ser una novela social, pero es muy consciente de lo que significa la pobreza y la riqueza en una sociedad como la nuestra, al final del libro, las cosas están como al principio, porque son, porque sí. La novela también es como la crónica de una violencia soterrada pero constante, que padecen siempre las mismas personas. Es una crónica de lo que nosotros nos hemos acostumbrado a llamar la normalidad o nos hemos acostumbrado a llamar la vida cotidiana y que en realidad es la humillación sistemática de un tipo de personas por otro tipo de personas”.

El símbolo del futuro

“Probablemente ellos en una película de Hollywood serían perdedores. Pero en mi novela no, porque sobreviven. Están vivos al final. No solamente están vivos, sino que tienen la capacidad de enfrentar el futuro. Porque en la novela hay dos niños que de alguna forma son un poco el símbolo del futuro. Si los mayores, que les reflejan como si fueran espejos, son capaces de avanzar y de sobrevivir y de seguir adelante, quiere decir que van a construir un futuro para esos niños, que esos niños tienen futuro. En ese sentido son ganadores. Son ganadores porque sobreviven".

"Los personajes del libro van tomando más o menos conciencia, unos antes y otros después, de que mientras estén juntos tienen una posibilidad. […] ¿El secreto común cuál es? Bueno, pues que estamos aquí y aquí vamos a seguir. Y como dice Juan en un momento de la novela, no se trata de lo que somos, se trata de cómo estemos y estamos bien y vamos a seguir estando bien. Ese es un poco el sentido de la novela".