"Negaré, incluso bajo tortura, que esta reunión ha existido": los audios que demuestran que Fernández Díaz dirigió la operación contra los Pujol

Madrid

El que fuera ministro del Interior en el primer gobierno de Mariano Rajoy, Jorge Fernández Díaz, protagoniza la última entrega de los audios de la corrupción que publica este miércoles El País. En esas grabaciones se escucha una conversación con el comisario Villarejo y el jefe de la Policía, Eugenio Pino, el mismo día en el que se iba a presentar una denuncia ante la Audiencia Nacional contra Jordi Pujol, sus hijos y Artur Mas, el 16 de diciembre de 2012.

De esos audios se deduce que la policía patriótica trabajó a las órdenes del Gobierno de Rajoy para buscar trapos sucios de los adversarios políticos del PP y, en concreto, que Fernández Díaz dirigió personalmente la operación Cataluña. Según concluyó una comisión de investigación creada en el Congreso de los Diputados, las principales víctimas de esa policía patriótica fueron los independentistas catalanes y los dirigentes de Podemos y en esa comisión, Fernández Díaz declaró que apenas cruzó con Villarejo "dos palabras, gracias a Dios" y que durante los casi cinco años en los que había ejercido la responsabilidad de ministro del Interior, "jamás" había despachado "nada con el señor Villarejo” pero las grabaciones que este miércoles publica El País demuestran que no fue así.

En esa conversación de 15 minutos que se hace pública ahora se escucha como Fernández Díaz acuerda con Villarejo y Pino presentar varias dos denuncias, una contra Jordi Pujol y sus hijos y otra contra el entonces presidente Artur Mas. La primera estaba apoyada en los testimonios del empresario Javier de la Rosa —como ya se demostraba en otros audios publicados— y una examante de uno de los hijos de Jordi Pujol. De hecho, Villarejo le cuenta al ministro que justo están cerrando en Barcelona el testimonio de esa "chica". Ambos habían sido captados por el comisario Villarejo, quien les prometió ayuda económica a cambio de sus testimonios ante la Policía.

La primera de las denuncias, le dice Villarejo al ministro, "no tocaría Artur Mas" sino solo a la familia Pujol pero a Fernández Díaz le interesa especialmente qué puede hacerse contra Mas: "La segunda sí que le toca", dice, y el comisario le cuenta que él ya lo ha planteado a la Audiencia Nacional: "Me han dicho que sí a elevar una pieza separada contra Artur Mas al Tribunal Superior de Cataluña". El ministro del Interior interrumpe al comisario en más de una ocasión para dejarle una cosa clara: "Para su información, esta conversación no ha existido", dice. "No ha existido, por supuesto", responde Villarejo. "Esta conversación no ha existido, ¿está claro? El ministro no sabe nada del tema", insiste Fernández Díaz. "No sabe nada, eso", replica el comisario. "Y estamos entre caballeros, por tanto, ¿está claro? Por tanto esta conversación no ha existido. A partir de ahí, ¿estamos en condición de judicializarlo en la Audiencia Nacional?", pregunta el responsable del Interior. "Yo creo que sí", le contesta Villarejo.

Los audios demuestran Fernández Díaz estaba informado de estas actividades del comisario, que le explica con detalle sus últimas gestiones relacionadas con la operación Cataluña y que pone de manifiesto la conexión de la cloaca policial con algunas instancias judiciales. "Materia hay para la Audiencia Nacional, ayer hablé con Santiago Pedraz, el juez decano de la Audiencia, y me dijo, no te preocupes, que si no cae uno de los cuatro [jueces] que ya están tocados abiertamente, lo que le voy a pedir al que le caiga en el reparto es que antes de hacer nada por favor hable con vosotros", explica Villarejo. "Con el fiscal general del Estado se ha hablado", dice Díaz, que inmediatamente después asegura: "Ni bajo tortura reconoceré que esta reunión ha existido".

Antes de eso, el ministro le había preguntado a Villarejo si van a ir ese día a ver al juez Fernando Andreu y el comisario le dice que "al que esté de guardia", que cree que "es Pablo Ruz". "¿Ruz no es el mejor, no?" le pregunta el ministro, ya que ese juez instruyó el caso Bárcenas o el caso Gürtel.