¿Quién mató a Marta Russo? Un asesinato que recuerda al caso de las niñas de Alcàsser

Madrid

1997. Un campus universitario en Roma. A plena luz del día. Una chica camina con una amiga por los patios de la facultad de Derecho cuando una bala atraviesa su cabeza. Muere unos días después en el hospital. Tenía 22 años. El asesinato de Marta Russo sigue siendo, 25 años después, uno de los casos más enigmáticos de toda la historia criminal italiana que, como apunta Patricia Peiró, hay muchos elementos que nos pueden recordar a las niñas de Alcàsser”. Porque al igual que en el caso Alcàsser, este caso “se perpetúa en la historia criminal de un país”.

“La historia de un país se puede contar a través de sus crímenes” y esta muerte, como confirma Peiró, “resume a la perfección los años 90 en Italia”: las investigaciones eran televisadas, los protagonistas se sentían estrellas y el móvil nunca estaba claro. Además, tal y como sostiene Francisco Pérez Fernández, criminólogo y profesor de la Universidad Camilo José Cela, “este crimen tenía una serie de variables que lo hacían muy interesante para los medios de comunicación: víctima joven y atractiva, ambiente político convulso...”.

“Ocurrió lo peor que te puede pasar”

Y tal y como sucedió en Alcàsser, los investigadores dieron palos de ciego durante mucho tiempo, la investigación policial estuvo sometida a una gran presión y no se despejó la incógnita de quién mató a Marta Russo. Como afirma Pérez Fernández, “ocurrió lo peor que te puede pasar en una investigación criminal” y en su afán por querer resolver el crimen con pruebas inconcluyentes, los investigadores utilizaron métodos “cuasi-inquisitoriales” - así los describe el criminólogo y profesor – para lograr algún hilo del que tirar.

Sin pruebas, sin testigos, y, lo más importante, sin un móvil que ligara a la muerte. Todo ello ha provocado que 25 años después Marta Russo siga en la memoria colectiva de todos los italianos y que sea uno de los grandes interrogantes de la historia del crimen en Italia. En España, como recuerda Pérez Fernández, el crimen de los marqueses de Urquijo es una de las grandes incógnitas de nuestro país y, como concluye Carles Francino, “Solo o en compañía de otros” es una frase grabada en mármol.