Guerra y poesía

El poeta y escritor británico Siegfried Sassoon se hizo famoso por sus versos antibelicistas publicados después de que combatiera como oficial durante la I Guerra Mundial. Como militar, Sassoon recibió diversas condecoraciones, entre ellas la Cruz Militar, que más tarde arrojó al río Mersey. Se declaró objetor de conciencia. Protestó públicamente porque el gobierno británico, según él, prolongaba innecesariamente la guerra, provocando la muerte innecesaria de muchos jóvenes. No fue juzgado como desertor sino que le declararon no apto para el servicio y pasó un tiempo internado en un hospital de guerra cerca de Edimburgo.

Ahora, Terence Davies, el cineasta británico, director de títulos como Voces distantes o La casa de la alegría cuenta en Benediction la historia de este poeta. Refleja su valor en el frente de batalla y también su oposición frontal a la guerra, asumiendo las consecuencias que eso suponía. Sin embargo, Siegfried Sassoon no pudo nunca admitir abiertamente su homosexualidad. El actor Jack Lowden, al que hemos visto en la película Dunkerke de Christopher Nolan o en series de televisión como Slow Horses interpreta a Siegfried Sassoon de joven, pero también, de alguna manera, y como él mismo reconoce, da vida al propio director, Terence Davies. "Ha sido una experiencia muy diferente de lo que imaginaba", reconocía el actor en el pasado Festival de San Sebastián. "Con Terence ha sido todo muy muy particular. Ha puesto mucho de él en este personaje, tanto que creo que he interpretado a Sasoon, pero también al propio Terence Davis", dice.

El resultado es una película sobrecogedora y de una sensibilidad mayúscula. Terence Davies utiliza imágenes reales y fotografías de la I Guerra Mundial para situarnos en el horror que fue esa contienda, donde los jóvenes eran enviados como reses de ganado al matadero. También nos habla de los privilegios de clase, de cómo los más acomodados de la sociedad miraron para otro lado y olvidaron pronto las consecuencias de la guerra. "En el Reino Unido se recuerda todavía la guerra como algo muy sentimental, pero lo cierto es que fue uno de los grandes desastres de la humanidad. La guerra llevó al imperialismo, las armas, las muertes. La I Guerra Mundial fue el primer periodo de la historia, especialmente en Inglaterra, en el que se perdieron muchas vidas sin sentido. Me gustaría pensar que si hubiera vivido en ese periodo hubiera hecho lo mismo que este personaje. Creo que su figura tiene mucho que enseñar a los jóvenes. No sé si tanto en términos de guerra, pero si sobre esa tristeza que él vivió", nos contaba Jack Lowden.

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Benediction ganó el premio al mejor guion en el pasado Festival de San Sebastián. Terence Davies ya había hablado de la I Guerra Mundial en una de sus anteriores películas, Sunset Song y de poesía en Historia de una pasión, una biografía de la poetisa Emily Dickinson. Ahora, en Benedictión, une esos dos mundos antagónicos: guerra y poesía. "La poesía de Siegfried Sassoon es fantástica y sus memorias, conocida como la trilogía de Sherston, también", explica el actor Jack Lowden. "Para interpretarlo me han servido mucho las cartas que escribió protestando por la guerra. De hecho, en la película, hay una escena leyendo esas cartas que rodé antes que el resto".

Siegfried Sassoon, hijo de padre judío y madre católica, se convirtió al catolicismo en los últimos años de su vida. Una decisión que causó sorpresa en su propia familia y que también se refleja en el film. Murió el 1 de septiembre de 1967, cuando le quedaban unos pocos días para cumplir 81 años. Ahora, Terence Davies nos recuerda quién fue en esta película que se estrena en España: Benediction.