"La primera barrera para instalar placas solares en un edificio es el desconocimiento"

La derrama para arreglar la escalera, la propuesta para repintar el rellano o la revisión del ascensor. Poner de acuerdo a los vecinos de una comunidad para el asunto más sencillo no siempre es fácil. Así que convencerlos para que accedan a utilizar la azotea para instalar placas solares se antoja, en algunas comunidades, casi imposible. Pero no lo es. Con la subida de los precios de la luz, cada vez más edificios optan por el autoconsumo solar, una forma de generar energía que solo requiere del visto bueno de un tercio de los vecinos. "La primera barrera es el desconocimiento", explica en Código de Barras Héctor Pastor, del área de Autoconsumo de la cooperativa Ecooo. En la mayoría de los casos, los vecinos no saben cómo pueden hacerlo y el impacto que puede tener en su consumo. Aunque poco a poco, la situación va cambiando.

Cuando un propietario se plantea hacer una instalación tiene varias opciones. Pedir permiso para poner una instalación individual, proponer que el consumo eléctrico se dirija a abastecer las zonas comunes o animar al mayor número de vecinos a que opte por la energía fotovoltaica. Esta opción es la más rentable y la que ha conseguido Enrique Martín. Vive en la urbanización Pablo Iglesias de Rivas Vaciamadrid (Madrid), donde los propietarios de medio millar viviendas han decidido instalar placas solares en sus terrazas. Él ha trabajado, junto a otros 50 vecinos, convenciendo a los demás para que autorizasen la instalación y se uniesen al proyecto. "Hubo que hacer un trabajo grande de información. Repartimos un tríptico por los buzones, hicimos un vídeo, fuimos puerta a puerta... Al final, conseguimos el tercio mínimo para que el proyecto saliese adelante".

Además del tercio que dio el visto bueno, 500 de las 938 viviendas van a apuntarse a la energía generada por placas solares. Las características de sus viviendas les permiten instalar cuatro placas a cada familiar y estiman que la inversión puede rondar los 3.000 euros. Martín cuenta que el ahorro previsto es de entre un 25% y un 60%, dependiendo de las tarifas que tengan ahora mismo contratadas. "También influirá la subida del precio de la luz. Cuanto más se incremente, más ahorro conseguiremos", razona.

Según un estudio de la compañía EDP, el 80% de las viviendas, contando unifamiliares y edificios, están preparadas para instalar paneles. Pastor comenta que "una de las mayores ventajas de la energía solar fotovoltaica es que la podemos adaptar a cualquier circunstancia. No siempre podemos instalar todos los paneles que nos gustaría, por las sombras o las chimeneas, pero prácticamente en todos los edificios se puede hacer".

En Ecooo han notado que el interés en este tipo de instalaciones está creciendo. Uno de los mayores impulsos está siendo el encarecimiento del precio de la luz. Martín asegura que en su urbanización los motivos son variados: "Por un lado, que la electricidad está cada vez más cara, pero también está la crisis climática y la contaminación. Además, hay mucha gente harta de los abusos de las eléctricas, es una combinación de cosas que hace que se hayan animado".

Para quienes se lo están pensando, Héctor Pastor recomienda contactar con una organización. "El autoconsumo colectivo no va de poner placas solares. Es un proceso de toma de decisiones con los vecinos, hay que llegar a acuerdos y es fundamental dejarse asesorar", comenta. También sugiere cargarse de paciencia ante unos procesos administrativos que, en ocasiones, se demoran más de lo esperado.