La comunicadora Inés Hernand se ha aproximado en Hoy por Hoy, dirigido por José Luis Sastre, al asunto de la meritocracia. En su nueva sección de este verano, bautizada ¡Qué necesidad!, intenta dar respuesta a preguntas cotidianas de nuestro día a día. En los estudios, en la educación, la meritocracia aparece y empieza a convertirse en una traba para muchos. «Es llamativo cómo el sistema capitalista neoliberal ha conseguido que todo el rato circunvalemos sobre esta idea de que el triunfo es económico, no es racional, no es afectivo y la narrativa colectiva esté estrechamente vinculada a esto; de forma que la desigualdad queda justificada y en el caso de que no logres ciertos ítems en tu vida es porque te has esforzado menos» Hernand se ha referido también a las barreras étnicas, de género o la diversidad funcional que afectan al desarrollo personal. «No es solo una carencia a nivel educativo sino que afecta a nivel sistémico a todo. Si provienes de una familia con pocos recursos, el ascensor social no existe», explica. El sector de la judicatura es uno de los que se suele poner de ejemplo de que se necesita apoyo familiar. Carlos Viader, magistrado, ha recordado que para acceder a una oposición tipo A1 se necesita al menos cuatro o cinco años de estudio y dedicación total tras terminar la carrera: «Memorizar de esa manera para cantar los temas supone un esfuerzo hercúleo». «Si vas a estar ese tiempo preparando las oposiciones, va a ser unos años en los que además te tienen que mantener. Y los preparadores y temarios cuestan dinero. No todas las familias pueden permitirse eso», ha explicado el magistrado. Viader ha dicho que las grandes fortunas no suelen accede al sector de la judicatura por algunas de las características: «Cuando aprobé estuve cinco años en Melilla. Te pueden mandar a cualquier sitio. Y los sueldos no son tan altos como se cree». «En mi familia no hay ni un solo juez. En mi promoción, solo el 5% que eran hijos de juez. Éramos 204 en mi promoción. El sistema es de tal naturaleza que el enchufismo es casi imposible», ha dicho el magistrado. Viader afirma que la sociedad percibe a la Justicia politizada y eso tiene que ver con la elección del Poder Judicial. El magistrado ha puesto el acento en entender cómo funciona la meritocracia: «Creo que es un sistema en que, en general, la mayor parte de las personas tienen la oportunidad de progresar; pero que hay gente que no tiene esas posibilidades. Yo sí abogaría en la judicatura por un sistema diferente que no te obligara a esa cantidad de años o a un sistema de becas que este año se ha instaurado». El magistrado cree que hay ascensor social en general. «La meritocracia es un invento del sistema capitalista neoliberal para hacerte creer que puedes llegar a ciertas cosas», ha concluido Inés Hernand su intervención.