Pepe Álvarez (UGT) reivindica un salario mínimo de 1.100 euros: "Si la CEOE no sale del atasco, habrá movilizaciones en septiembre"

Madrid

Después de que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, abogara este jueves por revalorizar el salario mínimo interprofesional (SMI) por la situación económica de "máxima incertidumbre", el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha asegurado en Hoy por hoy que esas declaraciones "demuestran una sensibilidad con estas materias".

"Agradezco a la ministra de Trabajo esas manifestaciones, sé que es lo que piensa", ha dicho. "Pero nosotros mantenemos la misma batalla con el Gobierno y con la CEOE. El SMI marca la pauta y está afectando ya a 3,5 millones de personas, que es mucha gente pasándolo mal".

"La situación en la que nos ha metido la CEOE es bastante difícil de mantener. Ellos son responsables de que no se hayan podido firmar convenios colectivos. Están en una situación de atasco y eso nos va a llevar a un contexto de movilizaciones —territoriales o estatales—, como está pasando en la mayoría de países europeos. Movilizaciones coordinadas con CCOO a lo largo del mes de septiembre que acabarán, seguro, en un acuerdo", ha asegurado.

Preguntado por el deterioro del diálogo social tras la pandemia, Álvarez ha asegurado que en ese momento la CEOE se vio en la necesidad de llegar a acuerdos, pero ha recordado que "los acuerdos siguen siendo positivos para el país", por lo que es necesario un pacto de rentas y de salarios". El secretario general de UGT, de hecho, también ha anunciado que le van a proponer al Gobierno un fondo de rescate de hipotecas para apoyar a las familias que no puedan hacer frente a los pagos tras el incremento de los tipos de interés.

"Un IPC totalmente desbocado"

Álvarez ha reconocido que habló con Garamendi antes de las vacaciones, pero mantiene que "no es un problema solo de hablar". La patronal, en su opinión, tiene que ser consciente de que en "este momento hace falta ese acuerdo" porque nos enfrentamos a "un IPC totalmente desbocado". Un mensaje que también extiende al Gobierno: "No se puede decir por la mañana que no se va a dejar a nadie atrás y por la tarde no subir el SMI".

Según álvarez, subirlo solo 49 euros es "quedarse muy corto" porque "no se le puede decir a la gente que ya no llega a final de mes que el año que viene va a perder un 5% de su poder adquisitivo". Su propuesta de salida es "redondearlo en 1.100 euros, que es el 10% del SMI actual", pero sostiene que "los argumentos son contundentes, por lo que debería ser también "una posición de llegada".

El secretario general de UGT asegura "no es cierto que los empresarios estén ganando menos dinero" con la inflación porque "repercuten los costes en los precios". Algunas empresas, según ha recordado, "están teniendo mayores beneficios".

Yolanda Díaz y Antonio Garamendi

Partidaria de fijar el SMI por encima del 60 % del salario medio, la vicepresidenta segunda ha recordado que el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores establece la revalorización del salario mínimo en función de la inflación, la participación de los salarios en la renta nacional, la productividad y la situación económica. "Vamos a subir el SMI y le pediría a la CEOE a que se comprometa con su país", ha dicho Díaz, quien también ha expresado su apoyo a las "movilizaciones sindicales frente a la patronal española".

La titular de Trabajo ha pedido al presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, "compromiso con su país" y ha criticado el bloqueo en la negociación de los convenios colectivos, algo que "no es una buena receta para un país que necesita que los trabajadores dejen de perder poder adquisitivo".