La vuelta al cole de Alfredo: libros de texto en braille, el bastón blanco y más ganas que nunca de hacer deporte
Más de 7.200 alumnos ciegos o con alguna discapacidad visual han comenzado el curso estos días en colegios ordinarios, con las mismas pautas y directrices que el resto de compañeros
La vuelta al cole de Alfredo: libros de texto en braille, el bastón blanco y más ganas que nunca de hacer deporte
Madrid
En este reportaje sonoro pasamos un día en el colegio con Alfredo, que este año cursa primero de bachillerato. Tiene la cabeza en la EBAU, en las notas que necesita para poder estudiar Magisterio de Inglés y en lo que más le gusta del mundo: el fútbol. Es un madridista convencido y disfruta con los partidos de su equipo a pesar de que ha ido perdiendo vista en los últimos años. Tiene el síndrome de Bardet-Biedl, una enfermedad genética que además de causarle problemas en algunos órganos está haciendo que cada vez vea menos. Todavía se maneja con cuadernos de papel, pero poco a poco ha ido incorporando a su vida los libros de texto en braille y el ordenador, las herramientas con las que va a poder seguir el curso junto a sus compañeros en un colegio ordinario, en el Lope de Vega (Alcalá de Henares, Madrid).
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La educación inclusiva es un derecho reconocido en la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, pero desde este curso, además, también se reconoce como tal en la nueva Ley de Educación (Lomloe). 7.271 estudiantes ciegos y con discapacidad visual han vuelto a clase en Primaria, ESO, Bachillerato y ciclos formativos de grado básico. Y más del 99% lo hacen en centros ordinarios con apoyo de los servicios de atención educativa de la ONCE. Este organismo tiene convenios con las diferentes administraciones educativas para que maestros como Juan Luis Collar ayuden a los alumnos.
Él va dos veces a la semana al colegio de Alfredo y le enseña braille y cómo manejarse con su puesto de trabajo en clase: una mesa en primera fila con un atril, una luz y una pantalla para ver los contenidos que el resto de alumnos pueden ver proyectados en la pizarra. Juan Luis no solo echa una mano a Alfredo. También se encarga de adaptar las clases junto a profesores como Ángeles Albertos (que el año pasado fue su tutora), José Luis Hernán (orientador del centro) o María Jesús Martínez (directora de secundaria de este colegio).
Ana Corbatón
Redactora en los servicios informativos de la...