El Kremlin considera «histérica» la reacción de parte de la población rusa tras anunciar «una movilización parcial» para ir a la guerra. El portavoz ruso, Dmitri Peskov, ha asegurado en una rueda de prensa que «uno podía entender de alguna manera la reacción histérica, extremadamente emocional en las primeras horas después del anuncio, incluso en el primer día, porque, efectivamente, hubo cierta escasez de información, que también es comprensible y justificable». Así justifica el Kremlin los comportamientos de los ciudadanos que no quieren ir al frente. Desde que se decretó esa movilización el pasado miércoles por el presidente de Rusia, Vladímir Putin, con el fin enviar a decenas de miles de reservistas a la campaña militar en Ucrania, cientos de rusos han salido del país en vuelos o han cruzado la frontera por carrera. También ha habido movilizaciones masivas contra el conflicto e incluso crecieron las búsquedas en Google buscando excusas para evitar el reclutamiento militar. Peskov achaca esta situación a la falta de información y asegura que desde este jueves «las líneas directas y oficinas de información se han activado de acuerdo con la decisión del Gobierno». El portavoz del Kremlin también ha recalcado que el Ministerio de Defensa de Rusia responde de forma regular a todas las preguntas y todas las líneas telefónicas están funcionando y los ciudadanos llaman para recibir respuestas a sus dudas. «Los medios publican las respuestas del Ministerio de Defensa y declaraciones de los comisarios militares. No hay escasez de información ahora mismo», ha enfatizado. El portavoz hizo estas declaraciones después de que se agotaran los billetes de avión a países vecinos de Rusia en los que los ciudadanos pueden entrar sin visados y se formaran colas en las fronteras con Kazajistán, el paso fronterizo de Georgia, Finlandia y Mongolia coincidiendo con el comienzo de la movilización parcial. No solo están llamando para ir al reclutamiento a los reservistas, unos 300.000, según aseguró Putin. También están recibiendo notificaciones personas que no están en la reserva y nunca sirvieron al Ejército, padres de familia con más de cuatro hijos y estudiantes, que en un principio iban a estar exentos, según han denunciaron abogados de derechos humanos y afectados. No obstantes, de las estimaciones de 300.000 reservistas, tras el anuncio el pasado miércoles, cerca de 10.000 hombres se alistaron voluntariamente en las filas del Ejército ruso en la primera jornada. También ha explicado el portavoz del Ministerio de Defensa ruso que la prioridad en la movilización la tendrán los tiradores, tanquistas, artilleros, conductores y mecánicos, además de otros técnicos y especialistas, independientemente de su rango militar. Además, se valorará la experiencia en combate. Algunos serán desplegados no en el frente, sino en la retaguardia de los territorios ocupados por Rusia en el Donbás y el sur de Ucrania. Serán movilizados los soldados rasos y sargentos no mayores de 35 años, y los oficiales de menos de 55 años, precisó. Por otro lado, serán eximidos los trabajadores de empresas de la industria militar, los padres de familias numerosas, aquellos que tengan a su cargo inválidos y enfermos, y los rusos que residan permanentemente en el extranjero. Tampoco serán movilizados los estudiantes que tengan que cursar estudios de manera presencial. Asimismo, este viernes Defensa ha precisado que no se citará a los empleados con educación superior que trabajan en el campo de la tecnología de la información, en operadores de telecomunicaciones, en medios de comunicación y en compañías que garantizan la estabilidad del sistema de pago nacional y la infraestructura del mercado financiero, la gestión de liquidez bancaria y la circulación de efectivo.