Cuba dice "sí" en referéndum al matrimonio igualitario

Madrid

Cuba aprueba el matrimonio igualitario con un 66,87 % de los votos a favor en el referendo celebrado este domingo en la isla. La unión entre personas del mismo sexo era uno de los puntos que se votaban y que se incluía en el Código de las Familias, un paquete legal que incluye también otros asuntos, como la gestación subrogada, según ha detallado este lunes el Consejo Electoral Nacional (CEN) al publicar los datos oficiales.

El referéndum, que se celebró este domingo, estuvo marcado por una amplia abstención de la población. Los colegios, incluso, ampliaron su horario debido a las lluvias que asolan el país y con el huracán Ian cada vez más próximo. Hasta las cinco de la tarde de ayer, según informó el CEN, habían participado 5.806.078 personas, de un censo inicial de 8.425.147, lo que implicaba una participación del 68,91 %. El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, ha recibido con "alegría los primeros resultados".

En comparación, la participación en el referendo constitucional de 2019 -el último ejercicio equivalente- fue del 84,4 %, y en el de 1976 alcanzó el 98 %, según datos oficiales. La alta abstención tiene una lectura política, porque el Gobierno y el conjunto del Estado cubano se posicionaron a favor del "sí" con una intensa campaña en medios oficiales y redes sociales, según los expertos. Esta consulta es la primera sobre una ley desde el triunfo de la revolución en 1959 y el tercer referendo.

Una consulta que divide a la población

Frente al "sí" del Estado cubano y muchos en las comunidades LGBTIQ, ha habido en las últimas semanas activistas, opositores e instituciones -como a las iglesias católicas y las evangélicas- que han abogado por el "no", principalmente en redes sociales. Algunos sectores pidieron el "no" o la abstención por el contenido en sí del texto; otros, por estar en contra del sistema comunista de la isla o por responsabilizar al Gobierno de la situación económica.

Días antes de la votación, Miguel Díaz-Canel se mostró convencido de que se impondría el "sí", pese a reconocer que algunos sectores podrían votar en contra por la grave crisis que atraviesa el país desde hace dos años. "Tenemos que acostumbrarnos a que en temas tan complejos donde hay diversidad de criterios y en medio de una situación compleja puede haber gente, incluso, que tenga un voto de castigo", indicó el presidente, que agregó que se trata de un posicionamiento "legítimo".