El Govern catalán descarta que Aragonès se vaya a someter a una cuestión de confianza
El nuevo equipo de gobierno se ha reunido por primera vez este miércoles tras la salida de Junts
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. / Quique García (EFE)
La portavoz de la Generalitat, Patrícia Plaja, ha reiterado este miércoles que el president Pere Aragonès "no se someterá a esta cuestión de confianza", como reclama Junts per Catalunya.
"El país no puede vivir en una inestabilidad permanente. Ahora es momento de gobernar, de tomar decisiones que mejoren el día a día" y de completar los proyectos del Ejecutivo, ha dicho en rueda de prensa en el día de la primera reunión de trabajo del nuevo Govern tras la salida de Junts.
Sobre la viabilidad de que salgan adelante los Presupuestos 2023, teniendo en cuenta que Junts exige la cuestión de confianza, Plaja ha pedido no avanzar escenarios y ha recordado que Aragonès ya fijó el martes el objetivo de aprobar las cuentas, y que "se confía en que la oposición haga un ejercicio de responsabilidad".
En la reunión de este miércoles se ha hablado "de manera general" de las cuentas públicas y ha intervenido la nueva titular de Economía y Hacienda, Natàlia Mas. Plaja ha reiterado que la prioridad es aprobar unos nuevos presupuestos, "pero hay también la opción de la prórroga, y esto se ha puesto sobre la mesa".
Ruptura por la cuestión de confianza
La cuestión de confianza, que el Govern niega que vaya a producirse, fue el motivo de ruptura de la coalición la semana pasada. Junts per Catalunya, liderado por Laura Borràs, acusó a Esquerra, anteriormente socio mayoritario, de no estar cumpliendo el pacto de gobierno, sobre todo, en lo relativo a los avances hacia el procès. Es por ello que propusieron que el president se sometiera a esa cuestión de confianza, que se orquestó a espaldas de ERC.
Este hecho desató una crisis de gobierno que precipitó la salida del vicepresident Jordi Puigneró, miembro de Junts. Aragonès le destituyó porque este no le contó que su partido iba a pedir la cuestión de confianza, pero insistió el president que, a pesar de esto, quería continuar con la coalición.
La decisión no gustó en el seno de Junts, que decidieron consultar la posible salida del Govern a sus bases. El pasado viernes, tras dos días de votación, la militancia de Junts apoyó la ruptura de la coalición, con un 55% de apoyos.
Se abría ante Aragonès "una nueva etapa", como el mismo calificó, en la que decidió seguir con la legislatura en solitario. Desde el domingo se han ido desgranando algunos nuevos miembros del equipo que este miércoles se ha reunido por primera vez, como el ex conseller socialista Joaquim Nadal o el exdiputado de Convergència Democràtica de Catalunya en el Congreso Carles Campuzano.
