"En las parejas hay amor y desamor, pero el sentimiento por Terry es para toda la vida": el "drama continuo" por el incumplimiento de la custodia compartida de las mascotas

Madrid

"Los animales son seres vivos dotados de sensibilidad". Así lo establece la Ley 17/2021, de 15 de diciembre, por la que se modifica el régimen jurídico de los animales en el Código Civil, la Ley Hipotecaria y la Ley de Enjuiciamiento Civil. Por tanto, las mascotas han abandonado su condición de "bien" o "cosa" para recibir un trato acorde a su cualidad de "ser sintiente" por parte de sus propietarios o titulares.

Además de garantizar el derecho de los propietarios a una indemnización por reparación moral, ante la muerte o "menoscabo grave" de la salud física o psíquica del animal, la modificación del Código Civil aplica el convenio regulador ante un divorcio. SI bien es cierto que el conjunto normativo no recoge directamente el término "custodia compartida", sí se contempla por una cuestión de analogía con los hijos.

Cuestiones como los periodos, las formas en las que se producirán las visitas o, incluso, las dotaciones económicas se deberán contemplar en el acuerdo de la pareja, de no hacerlo será la Justicia quien decida velando por la protección del animal. El texto viene a modificar una de las decisiones más polémicas, que contemplaba que el titular del chip, en el que solo podía figurar una parte, era el encargado de su custodia.

Este último punto es el motivo por el que Francisco Sánchez se encuentra "anímicamente mal" desde febrero de 2020. Un mes antes de que estallara la pandemia rompió la relación de hecho con su pareja, con quien llevaba 10 años. Ella se ha negado rotundamente a que él pueda visitar a Terry Newton, un Boston Terrier que Francisco adquirió, para criar en conjunto, en noviembre de 2016.

"El juez no ve el drama"

"Hace mucho tiempo que no sé nada de él", se lamenta. Su sentimiento hacia Newton es equiparable al que existe entre padres e hijos. SU expareja constaba en el identificador del animal por lo que un juez falló en su contra. "Los jueces, encargados de impartir justicia, no están en un mundo terrenal y no padecen lo que sufren las personas", comenta.

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Y es que Francisco no puede olvidar cada momento que pasó con su mascota. Aunque son de la misma ciudad, trabajaban en lugares distintos lo que le obligaba a "ir a Barcelona todos los fines de semana y festivos". Pese a las vacaciones que realizaron los tres fuera de España considera que a su "pareja le ha faltado el amor a la mascota para que yo pueda disfrutarlo", señala.

"El tema de las parejas es ley de vida, hay amor y desamor, pero el amor por las mascotas es para toda la vida", matiza Francisco antes de declarar que "lucho para que esto no ocurra con otras personas que a lo mejor no tienen la capacidad de lucha que tengo yo". El propietario no desistirá hasta que consiga la custodia compartida, ya que independientemente de que el chip no podía estar a nombre de ambos, considera que "el juez no ve el drama humano" y que "la mascota no puede opinar por lo que se le somete a este castigo"

Recurso al Constitucional

Carlos Soliva es abogado y pionero en la defensa de los derechos de los animales. Explica que este caso ya ha llegado hasta el Tribunal Constitucional. "Se promulga una ley que establece la custodia compartida, pero antes ya había resoluciones por la que se establecía que la relación de afectividad con el animal podía compartirse", asegura.

De hecho, el jurista señala un hecho paradójico. "Curiosamente la misma sala que deniega el recurso de Francisco dictó una sentencia pionera de Cataluña, fue muy viral en medios de comunicación", apunta antes de recalcar que lo "increíble" es que "modificando la ley dice la misma sala que el chip sí que determina".

En un divorcio con hijos, menos problemas

Aplicando los actuales términos jurídicos, considera que "si hay hijos no hay problemas", ya que el "lote va completo": "a los menores no los vas a obligar a que además corten con sus animales". Aunque se podría establecer un peritaje, apunta que la mejor opción en que lo determinen los propios miembros de la pareja.

"Es un duelo que no existe, el perro está ahí y quieres relacionarte con él, pero se impide por problemas ajenos, como el chantaje", apunta Soliva. Por su parte, Francisco continúa inmerso en la pérdida. Si bien ahora tiene otro perro, no puede sustituir a su mascota "Uno puede tener varios hijos, pero no lo sustituye, es un sentimiento, no puedo sustituir a mi Terry", culmina