'El fantasma y la señora Muir', una deliciosa comedia romántica
Una novela divertida y refrescante que explora la capacidad del amor para trascender las fronteras del más allá
'El fantasma y la señora Muir', una deliciosa comedia romántica
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R. A. Dick nació como Josephine Aimee Campbell Leslie el 8 de junio de 1898 en Wexford, Irlanda y murió el 28 de abril de 1979. Publicó 'El fantasma y la señora Muir' en 1945. A este título le seguirían cuatro novelas más. Está considerada una autora de literatura fantástica, así como cultivadora de la comedia gótica o costumbrista.
'El fantasma y la señora Muir' es una comedia romántica encantadora, poética y refrescante, que explora la capacidad del amor para trascender las fronteras del más allá. Es muy divertida y tiene también un punto ácido. En 1945, en un mundo devastado por la guerra, este libro reflejó admirablemente la experiencia de las mujeres tras el conflicto mundial.
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La aparición de 'El fantasma y la señora Muir' causó un gran impacto y tuvo una enorme repercusión en la sociedad inglesa del momento. El uso del seudónimo masculino es un recurso del que también se sirvieron otras escritoras pertenecientes a la literatura de la 'Nueva Mujer' del siglo XIX, precursoras de Dick. Tan solo dos años después, fue llevada a la gran pantalla por Joseph L. Mankiewicz con guion de Philip Dunne y un reparto incomparable: desde Gene Tierney hasta Rex Harrison, pasando por George Sanders y Natalie Wood.
Un pulso romántico entre lo terrenal y lo sobrenatural
Como señala Miguel Barrero en Zenda, "'El fantasma y la señora Muir', sobre el papel, no deja de ser una comedia romántica, pero una parte importante de su mérito está en la sutileza con que su argumento viaja del terror al melodrama y de allí a la fantasía. La delicadeza que desprende, la magia que irradia la conexión entre las imágenes que se suceden en la pantalla y las palabras que les dan sentido, impiden que quien se sumerge en ella salga indemne. Hay un rasgo que distingue a las buenas historias: por mucho que uno las conozca, por más que las sepa de memoria, no es posible regresar a ellas sin sentir un estremecimiento agradecido, el temblor de la conciencia que se sorprende interpelada y reconocida, la ratificación de que hay narraciones que cumplen una labor tan crucial como encomiable: la de procurar que nos sintamos menos solos".
Según escribe Patricio Sánchez-Jáuregui, 'El fantasma y la señora Muir' es una obra costumbrista, con ingredientes excéntricos, de gran impacto social y heredera de la mejor tradición femenina anglosajona. La obra se publicó al término de la Segunda Guerra Mundial y relata con estilo cuidado y viva voz las vicisitudes que muchas mujeres tuvieron que enfrentar en soledad. La crudeza del tema, tratado de manera sobria, pero con contenido espíritu poético, no impide que el libro derroche humor y desprenda ternura a través de un pulso romántico entre lo terrenal y lo sobrenatural.
El entramado de enfados, confidencias y tejemanejes que la alejan de una historia de amor romántica
Como señala GWW en Paperblog, la relación entre el señor Gregg y Lucy Muir es el corazón de la novela. Un entramado de enfados, confidencias, consejos y tejemanejes que se aleja de una historia de amor romántica, adentrándose en las complicadas relaciones entre dos personas. El firme deseo de no perder su independencia es la guía de la vida de la señora Muir. Descifrar los sentimientos de la señora Muir, describir sus necesidades y miedos, sus deseos y sus intenciones es un proceso que se va desvelando en la novela de manera progresiva.
R. A. Dick sabe dejar a un lado los clichés más habituales en las novelas folletinescas en las que sin duda se inspira y traza un relato ciertamente complejo y maduro de la protagonista. El complejo nudo de matices y emociones de los que se compone la obra, junto a algunas dosis de ese inevitable humor inglés, son elementos claves de la novela.