Iturralde González: "Según el reglamento, una mano por encima del hombro siempre es mano, aunque le pegue en el pecho"
El exárbitro explica, en 'Carrusel Deportivo', las dos polémicas más claras del Real Madrid - Girona
Instante en el que el balón toca en el pecho de Marco Asensio y, posteriormente, en el hombro
El Real Madrid empata por segunda vez en las 12 jornadas de LaLiga disputadas hasta la fecha. Esta vez, contra el Girona FC, donde han sucedido varias acciones polémicas en la segunda mitad. Cristhian Stuani transformó un penalti en gol tras una mano de Marco Asensio en el área de Courtois y, posteriormente, Mario Melero López anuló el tanto a Rodrygo tras una pugna con el guardameta rival, Paulo Gazzaniga.
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Penalti a favor del Girona, minuto 79:
Marco Asensio se encontraba en su propia área y el balón le tocó en su pecho, en primera instancia y, posteriormente, en su codo izquierdo. El colegiado paró el partido minutos después de lo ocurrido para que el VAR revisara la imagen. "Tenía el brazo en 90º grados y le pega en el codo por dentro", narraba Antonio Romero antes de que Melero señalara penalti.
"El reglamento lo que dice es que una mano por encima del hombro siempre es mano, aunque le pegue en el pecho como al inicio de la jugada, donde Asensio ya la tiene abierta, entonces no cabe el procedimiento de rebote", explicó Iturralde González.
"Os voy a poner el mismo ejemplo para que veáis, vamos la balonmano", continuó argumentando en los micrófonos de 'Carrusel Deportivo', "cuando hay una contra el portero se abre de manos y de pierna sara ocupar más espacio. Si le pega en la cabeza y le va a la mano es o no es rebote porque desde el principio está ocupando un espacio. Si lo trasladamos al fútbol, Asensio desde el principio de la jugada tiene el brazo abierto por encima del hombro y ya no se considera rebote, aunque pegue primero en el pecho".
Segunda polémica: gol anulado a Rodrygo:
Mariano Díaz arrancó una larga galopada por el costado derecho en el minuto 89', recortó dentro del área y Rodrygo pugnó con el portero del Girona FC, Paulo Gazzaniga, por el balón, jugada que revisó el VAR. El cuero terminó dentro de las redes y, mientras el brasileño celebraba el gol, Melero lo anuló.
"El árbitro ha hecho la seña de que Gazzniga tenía la mano apoyada en la pelota y que por eso la tenía controlada. Cuando la quiere recoger, con la mano apoyada en la pelota, es cuando Rodrygo mete la puntera", decía Antonio Romero.
"Si tiene la mano encima del balón es posesión. Sí, lo tiene, aunque sea con una mano. El portero, una vez que tenga la mano encima del balón, aunque sea una mano y debajo tenga el césped, es retención. El VAR, en esta jugada, para la imagen justo cuando disputa el balón Rodrygo y Gazzaniga tiene la palma encima. El portero, cuando tiene el balón en la mano, como los de baloncesto, encima de la palma de la mano, viene un jugador y se la quita, también es falta, es retención", explicó Iturralde González.
