Ni ley ni justicia para los bebés robados en España.

Madrid

En el cajón de propuesta de leyes está la Ley de los Bebés Robados en España. Un texto que las asociaciones de afectados por estas tramas criminales, habían presentado en 2018 y que todas las fuerzas en ese momento en el Congreso aceptaron por unanimidad. Ahora está en periodo de enmiendas desde 2020. Dos años en los que no se ha alcanzado consenso para presentar las enmiendas, sobre todo, en las dos fuerzas que forman el gobierno de coalición, como ha denunciado Sol Luque, presidenta de “Todos los niños robados son mis niños”. Antes de saludarla hemos escuchado a Marga Calvo, presidenta de la Asociación Itxaropena (Bilbao) y María José Picó, presidenta de la Asociación Víctimas de Alicante. Marga es madre de un bebé que nació en 1975 y no consta en ningún archivo ni registro. Le dijeron que había muerto. Y nunca más se supo. Y María José busca a su hermana gemela, la madre las vio a las dos vivas y bien, pero la durmieron tras el parto y una de las niñas “murió de frío” según la monja que les comunicó la noticia. Impresiona escuchar a Marga contar cómo se dieron cuenta que el bebé no había muerto. Fue su madre, “que nunca había dicho nada” al sostener a su nieta en brazos le dijo que “la cajita que llevó al cementerio no pesaba lo que pesa nuestra nieta”. Al escuchar esto se fue inmediatamente a buscar en el registro y en los archivos lo que había pasado con su hijo. No encontró nada. Y es precisamente esto lo que quiere solventar el texto legal. Que se abran archivos y registros para conocer la verdad de lo ocurrido en este país desde 1940 a 1980. Miles de bebés fueron sustraídos ilegalmente de sus familias nada más nacer. Sol Luque insta a que salga adelante la Ley y que el estado se encargue de la búsqueda activa de esos bebés, de la denuncia y persecución de quienes practicaron impunemente esta barbaridad. Que se considere, como marca la ONU, como crimen de lesa humanidad y no prescriban los delitos, como está pasado ahora.

Uno de los obstáculos, cree Sol Luque, está en la tutela judicial. En España existe un temor o una cierta alergia a juicios históricos. Aunque se trate de injusticias tan flagrantes y vergonzosas como esta. “Señores diputados, pónganse las pilas” “no nos robaron la cartera, nos robaron a nuestros hijos” claman. Y como mensaje final, Marga, dice algo que repiten todas las madres de bebés robados “no vamos a cesar en la búsqueda, desde aquí a mi bebé le digo que nunca le vamos a olvidar, siempre te buscaremos, siempre te esperaremos”.