Los presentadores Pablo Motos y Bertín Osborne y los políticos de ultraderecha Santiago Abascal y Ortega Smith son los protagonistas de la última parodia del programa de TV3, Polònia. Los actores del espacio televisivo, caracterizados de estos personajes públicos, hacen una versión del clásico de los Backstreet Boys, «I Want It That Way» en la que ponen en el centro su propio concepto de la masculinidad para reivindicarla. Para entender el gag hay que fijarse en la última campaña del ministerio de Igualdad y las reacciones que ha provocado en algunos sectores. La cartera que dirige Irene Montero lanzó en noviembre un vídeo dentro de la campaña de sensibilización contra las violencias machistas con motivo del 25N, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Explica que una de cada dos mujeres en España ha sufrido algún tipo de violencia machista a lo largo de su vida. «Si no vas a hacer nada para pararlo, #EntoncesQuien?», se pregunta. Entre las escenas que presenta aparece un presentador de televisión que pregunta a un invitada si usa ropa interior sexy o cómoda. Pablo Motos se defendió tras sentirse señalado por la última campaña de Igualdad sobre la violencia machista. «Hemos criticado muy duramente la ley del solo es sí es sí y el ministerio se ha gastado más de un millón de euros de dinero público en hacer una campaña de televisión para llamarme machista», dijo. Durante el programa y después de ver la campaña, Motos ha seguido dando explicaciones sobre una entrevista que le hizo a la actriz Elsa Pataky sobre su ropa interior. «Esta pregunta se la hice en el año 2016 a Elsa Pataky. Pero es que Elsa Pataky venía a promocionar una campaña de ropa interior y de pijamas sexys». Durante el vídeo, los protagonistas entonan la versión del conocido grupo de los 90 y cantan letras como «Di por qué queréis tantos derechos. Y por qué ofende hablar de pechos. No lo sé. Yo solo veo tu interior, ¿llevas tanta o culotte? No es sexismo, es romanticismo». Hacen alusión también a las propias justificaciones cuando algunas de sus actitudes son calificadas de machistas. «Ahora los hombres no pueden ni hablar. Te cancelan ya por pensar. Si no es nuestra culpa, sale del corazón, bombeando hasta el pantalón», entonan. No soy machista, ni feminista, no veo etiquetas, solo tus tetas. Si le critican sus entrevistas por ir palote, ¿por qué ese escote? Di por qué queréis tantos derechos. Y por qué ofende hablar de pechos. No lo sé Yo solo veo tu interior, ¿llevas tanta o culotte? No es sexismo, es romanticismo. Siento amor y anhelo si te huelo el pelo. Di por qué no puedo ser humano. y, ¿por qué no puedo meter mano? siente orgullo de ser mujer ¡y enseña ese escote bien! Ahora los hombres no pueden ni hablar. Te cancelan ya por pensar. Si no es nuestra culpa, sale del corazón, bombeando hasta el pantalón. Si es lo que quieren, pues ya lo tienen. Verán, verán, verán. No volveré a decir. No diré cosas tiernas ni a qué hora abren esas piernas. Ya nunca os iremos detrás, aunque llevéis falda. Lloraréis. No habrá machos de antes. Y, ¿por qué? Vosotras los matasteis. Os jodéis, por fin tendréis vuestra igualdad, porque nos daréis igual, hasta la hora de cenar.