Los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona (Eurogrupo) se han comprometido este lunes a focalizar las ayudas durante 2023 a los hogares más vulnerables y empresas temporalmente expuestas a la crisis energética, al tiempo que se han emplazado a estudiar medidas como, por ejemplo, un modelo de fijación de precios de la energía a dos niveles y otros regímenes que alcancen objetivos similares, teniendo en cuenta las características nacionales. El Eurogrupo ha mostrado su acuerdo con la evaluación de la Comisión de que todos los Estados miembros deben retirar progresivamente las medidas generalizadas e indiscriminadas a medida que disminuyan las presiones sobre los precios de la energía, por lo que muchas de las medidas de apoyo actualmente en vigor expirarán a principios del próximo año. En este sentido, ayudas como la bonificación de 20 céntimos al combustible implantada por el Gobierno español, que expira el próximo 31 de diciembre, podrían verse acotadas y pasar a beneficiar únicamente a la población más vulnerable para dejar de aplicarse de manera generalizada como ocurre actualmente. De hecho, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Economía, Nadia Calviño, ya ha avanzado, antes de reunirse con sus homólogos de la eurozona en Bruselas, la intención del Gobierno de limitar ciertas medidas para contener la inflación, como es el caso de la ayuda a los carburantes, para avanzar de una primera fase de choque generalizada hacia una más específica dirigida a los sectores más vulnerables, en línea con lo acordado por los Diecinueve. Entre las nuevas medidas que los ministros se han emplazado a estudiar destaca un modelo de fijación de precios de la energía de dos niveles al que podrán optar las empresas y los hogares más afectados y que incluye un paquete de servicios energéticos subvencionado que, una vez se supere, aplicará precios de mercado. Según han afirmado los Diecinueve, las medidas deberán apoyar una mayor reducción de la dependencia energética de Rusia y acelerar la descarbonización de la economía, lo que requiere preservar la señal de precios para reducir el consumo de energía e incentivar las inversiones en eficiencia energética e infraestructuras energéticas preparadas para el futuro, incluidas las interconexiones, almacenamiento y tecnologías renovables innovadoras. Asimismo, se han comprometido a seguir coordinando su respuesta de política fiscal en relación con el apoyo a la energía en la zona del euro y a continuar debatiendo en próximas reuniones un enfoque común para los hogares, incluida la reflexión sobre las formas adecuadas de reducir el apoyo, basándose en las aportaciones de la Comisión y en la experiencia de los miembros de la zona del euro. No obstante, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, ha asegurado que Europa entrará en recesión este invierno. «Tendremos una recesión en invierno», ha dicho.