Francia le quita el sueño a Marruecos
En un partido de falsas apariencias, los galos jugarán su segunda final del Mundial consecutiva (2-0)
Francia defenderá su título de campeona ante Argentina en la final del Mundial. Tras alzar el campeonato en 2018, los de Didier Deschamps enterraron toda maldición habida y por haber para estar, una vez más, a un paso de ser los mejores del mundo. Esta vez lo consiguieron ganando a una combativa Marruecos (2-0) que puso en aprieto a los Bleus, que termina su legendaria travesía en unas semifinales en las que merecieron más.
Marruecos cayó luchando hasta el final
El guion del partido, a priori, sería lo que quisiese Marruecos. Siempre había sido así, y nada hacía indicar que no fuese a ir por los mismos derroteros ante los vigentes campeones. Pese a ello, la esperanza en su exceso es mala compañera. Algo así tuvo que pensar Jawad El Yamiq cuando salió a cortar un balón filtrado hacia Griezmann y no lo consiguió, muy a su pesar. Ese error provocó una consecución de rebotes que acabaron con Theo Hernández metiendo el primer gol del partido, rompiendo todos los esquemas esperables. Por primera vez en el torneo, el guion que proponía Marruecos era el que venían interpretando sus rivales.
Carrusel Mundial | Francia 1-0 Marruecos | Gol de Theo Hernández
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Francia, como si volviese al 2018, estaba feliz con el nuevo panorama. Los de Regragui, tras un entendible shock por recibir el primer golpe al mentón en el torneo, trataron de sobreponerse. Y, al contrario de lo que se podía esperar, respondieron y sorprendieron a los galos. Era el partido de las falsas apariencias, del engaño. No por nada nos quedará la duda de lo que sucedió en el área entre Boufal y Theo Hernández. Unos dirán que es penalti, otros que es falta en ataque, pero la única realidad es que no vimos repeticiones para apreciarlo. Una pena. Quizás fuese por la desazón del engaño, pero a partir de ahí se animó el partido. El reloj indicó que ya habíamos llegado al descanso, reafirmando el milagro que era llegar al interludio con un marcador tan corto para ambos.
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La segunda mitad comenzó con la intensidad mal entendida por parte de los marroquíes. Excitados por estar encerrando a Francia en los primeros compases, cada carrera (o intento de ello) de Mbappé se cortaba con una falta. No ayudó la gestión de partido del colegiado, dejando que cada posesión, ya fuese a favor o en contra, pudiese terminar en susto para los galos. Poco a poco, resistiendo, iban achicando agua y amargando a Marruecos. Se merecían el gol, pero el fútbol es así y pocos lo entienden como esta Francia de Deschamps. En un final cruel, Kolo Muani anotó de rebote el definitivo 2-0. Gancho directo al mentón; Marruecos a la lona. Así, con las botas puestas y haciendo honor a un partido en el que las falsas apariencias fueron protagonistas, el cuento de hadas de los africanos llegó a su fin.
Carrusel Mundial | Francia 2-0 Marruecos | Gol de Muani
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El jugón: Antoine Griezmann
Teóricamente, es delantero. Pese a ello, está siendo el mejor centrocampista del Mundial de Qatar. Apareciendo en todos lados, imbuido por el espíritu del lesionado N'Golo Kanté, fue vital un día más para que no se partiese su equipo. Da igual si tenían o no el balón, si sufría o no Francia: Griezmann siempre estaba para subir el nivel de los suyos.
La polémica
No fue el día de César Ramos. Por desgracia para él, su mal nivel vino en todas unas semifinales del Mundial. Solo hay un peor momento, y sería en la final. Para Iturralde González, hubo penalti de Theo Hernández sobre Boufal, y una roja perdonada a Marruecos minutos más tarde. Luego, en la segunda mitad, Mbappé pudo acabar lesionado por las entradas de los marroquíes y no frenó su exceso de brusquedad con amarillas.