Ana Orantes, el caso que cambió la forma de abordar la violencia machista en España
El asesinato de esta mujer después de haber denunciado en un programa de televisión el maltrato de su exmarido marcó un antes y un después en la forma de abordar este asunto en los medios de comunicación.
Ana Orantes, el caso que cambió la forma de abordar la violencia machista en España
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Madrid
El 4 de diciembre de 1997 el testimonio de Ana Orantes hablando de maltrato por parte de la que había sido su pareja toda su vida rompió los esquemas que conocíamos hasta entonces. Una mujer de 60 años de Cúllar Vega (Granada), contó en horario de máxima audiencia en el programa 'De tarde en tarde' de Canal Sur algo que muchas mujeres sufrían en su casa, aunque casi ninguna lo mencionara públicamente. "Venía borracho y me daba una paliza porque no le gustaba cómo estaba un vaso en la mesa", contó Orantes. Un infierno que sufrió durante 40 años en los que intentó huir de casa, le denunció en diversas ocasiones, y cuando consiguió divorciarse el juez ordenó que compartieran la vivienda que tenían en común.
El 17 de diciembre, 13 días después de exponer su situación, el hombre la mató quemándola viva en el patio de esa casa en la que estaba condenada a compartir techo con el que terminaría siendo su asesino. Además de la conmoción social que supuso, el caso sirvió como punto de inflexión en el tratamiento de la violencia machista en España. Los asesinatos como el de Orantes se contaban en los informativos de entonces como sucesos, violencia doméstica o malos tratos pero nunca como violencia machista. "Casadas con su asesino", tituló el diario El País unos días después. "Los propios medios se han concienciado sobre su papel en cuanto al tratamiento dela violencia contra las mujeres", explica Rita Radl, profesora de Sociología especializada en estudios de género y durante muchos años directora del Centro de Investigaciones Feministas y de Estudios de Género de la Universidad de Santiago.
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Sin embargo, aún hay mucha violencia contra las mujeres en las redes sociales. Radl habla de violencia verbal, la forma de expresarnos o incluso la infrarrepresentación de mujeres en los medios de comunicación. "Los actos de violencia como el acoso o violencia sexual están muy presentes en la sociedad y los medios contribuyen a mostrarlos", asegura esta experta, que incide también en la importancia de la educación. "Aunque hemos avanzado mucho, todavía es importante trabajar la sensibilización de los jóvenes en el ámbito educativo".
Un caso que también cambió las leyes
Tres meses después del asesinato de Orantes, en marzo de 1998, el Gobierno aprobó su primer plan de acción contra la violencia doméstica. El siguiente paso fue la modificación del Código Penal de 1999, año en el que se tipificó la violencia psicológica como una forma de malos tratos en el ámbito doméstico. También se reformó la Ley de enjuiciamiento criminal para introducir la persecución de oficio de los malos tratos, es decir, sin necesidad de denuncia por parte de la víctima.
En 2002, el PSOE registró una proposición de ley contra la violencia de género, pero no fue admitida a trámite por los votos en contra del Partido Popular, que gobernaba en aquel momento. Un año después, en 2003, se aprobó la Ley reguladora de la Orden de protección de las víctimas de la violencia doméstica, que permitió a los jueces adoptar medidas civiles y penales provisionales en un plazo máximo de 72 horas después de recibir una denuncia por violencia machista. Aquel año también se empezaron a contabilizar oficialmente la víctimas de la violencia de género, que a día de hoy suman 1.174.
La Ley integral contra la violencia de género llegaría finalmente en 2004 con el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero. La norma fue aprobada por unanimidad e introdujo un agravante por género en los delitos de lesiones, maltrato habitual y trato degradante. También mecanismos de protección para las víctimas como indemnizaciones, asistencia jurídica gratuita o recursos habitacionales, evitando así que las mujeres maltratadas tuvieran que vivir con su agresor, como le pasó a Ana Orantes.
Sonia Palomino
Redactora en los servicios informativos. En la Cadena Ser desde el año 2011. Actualmente cubriendo la...