Mazapanes inapropiados, un Papá Noel chino y 'nudes' en el grupo familiar: las anécdotas más divertidas de la Navidad

Madrid

Apenas quedan unas pocas horas para Navidad, pero en realidad no debería ser un día muy distinto al de los años anteriores a la pandemia y seguro que muchos de vosotros habéis vivido alguna situación surrealista típica de estas fechas de champán y jolgorio. Para conocer las más divertidas hemos preguntado a varios cómicos por sus mejores banquetes navideños.

¿Quién no ha tenido una experiencia traumática con un disfraz de Papá Noel? Al menos, la actriz y monologuista Toni Acosta sí la ha tenido. Acosta recuerda cuando pidió a una amiga que se disfrazara de Santa Claus para sorprender a los niños de su familia. Consiguió su propósito y les sorprendió... pero por otras razones: "Mi amiga es china... Entonces, claro, los niños nos miraban y nos decían '¿Es china?' y, además, '¿¿Es mujer??'", rememora entre risas. "La magia se evaporó por completo", bromea.

También se evaporó algo de magia en la anécdota familiar del cómico Héctor de Miguel: "Un tío mío, el día 22 o así, estaba de celebración con los de su oficina y empezaron a pasarse vídeos de Mamás Noeles con poca ropa. Entonces, en el fragor de los vinos, se equivocó y envió uno de los vídeos al grupo familiar... donde está su hija pequeña. Me reí bastante con ese momento", cuenta con una carcajada.

Aunque el premio a momento navideño incómodo se lo lleva el humorista Miguel Anómalo: "El mejor momento de una cena navideña fue cuando mi padre, muy emocionado, sacó los primeros mazapanes que hacía para agasajar a mi novia de entonces". Hasta aquí todo bien, pero sigamos: "Mi madre y él, muy orgullosos, señalaban la forma de pez, que era alargada y con dos protuberancias al extremo emulando a una cola... Si aquello eran peces, ¡eran peces-polla! Mi padre es el inventor de los mazapenes. Todavía nos dan ataques de risa cuando nos acordamos de ese momento", relata.

Parece que la familia siempre se fija más en las meteduras de pata que en las cosas realmente importantes, como le pasó al guionista Raúl Pérez: "Iba a nacer mi hija mayor y lo comuniqué en una cena de Navidad, pero nadie me hizo ni caso". "'Les dije: ¡Vamos a ser padres!' y me respondieron: 'Vale, vale, calla que estoy viendo a Ramón García'", recuerda Pérez con humor.

"El 2020 no me lo iba a joder nada ni nadie"

Aun así, siempre queda la esperanza de que las próximas Navidades serán mejores. Saray Cerro, cómica valenciana, tenía grandes expectativas para el nuevo año: "En Nochevieja de 2019 dije gritando a mis amigos y a más gente que el 2020 no me lo iba a joder nada ni nadie. Y, bueno, no hace falta que diga lo que pasó en 2020...".

Haya esperanza o no, siempre podemos sacar algo positivo de las fiestas navideñas. O al menos intentarlo. Para Cerro, lo mejor de está época son los reencuentros "porque normalmente cuesta mucho coordinar las agendas", pero reconoce que, al mismo tiempo, juntarse es "lo peor". Toni Acosta se decanta por la "comidita rica" y Raúl Sánchez también, aunque con una objeción: "Hay comida buena, pero lo malo es que hay demasiada". Por su parte, Anómalo lo tiene claro: "Lo mejor de las Navidades son los mazapenes de mi padre".