Corredor H2Med: qué es, cuándo estará en funcionamiento y por qué será tan importante para Europa
Este fin de semana Alemania se ha unido al proyecto junto a España, Francia y Portugal
Proyecto H2Med presentado por España a la UE / MITECO
Madrid
"Hemos logrado desbloquear el corredor de la energía verde entre la Península Ibérica y la Unión Europea". Con estas palabras anunciaba Pedro Sánchez, a su llegada al Consejo Europeo el pasado 20 de octubre, que Emmanuel Macron finalmente se abría a la construcción de un gasoducto que uniera la Península Ibérica con Francia. Sin embargo, lo que los gobiernos español y galo acordaron no era retomar la construcción del MidCat, un tubo que uniera ambos países a través de los Pirineos y al que apenas restaban 200 kilómetros de construcción hasta la frontera, si no un proyecto submarino que uniera Barcelona con Marsella, dos puertos de mar en sendos países dotados, en ambos casos, con la infraestructura necesaria para poder absorber el gas e integrarlo en su propio red sistema: el BarMar. Un proyecto que tendrá, apuntaron entonces fuentes del Ejecutivo, un menor impacto ambiental y social, por tener un trazado submarino, pero que también tardará más tiempo en construirse y, por tanto, también la inversión a realizar será mayor.
Y precisamente para reducir el desembolso que los países tendrían que hacer para poner en marcha estas infraestructuras, en la Cumbre Europea de Alicante en que la presidenta de la Comisión, Ursula Von Der Leyen, se encontró con los presidentes de Francia , Portugal y España, se produjo una modificación sustancial en el proyecto: el BarMar —H2Med si se tiene en cuenta todo el trazado y no solo la conexión entre Barcelona y Marsella— ya no sería un gasoducto que después se adaptaría para el transporte de hidrógeno verde, sino un hidroducto, diseñado ex profeso para el transporte de hidrógeno. El objetivo, en este caso, es poder beneficiarse de la financiación que la Comisión Europea otorga a los Proyectos de Interés Comunitario que pueden ser financiados hasta en un 50% por los fondos del Plan RepowerEU.
¿Cuánto costará la construcción del H2Med?
Más allá del proyecto inicial, el BarMar, que buscaba unir España y Francia, el H2Med extiende el recorrido de la infraestructura hasta Portugal, dividiendo el proyecto en dos tramos: el que une Celorico da Vieira (Portugal) con Zamora, que cubrirá 248 kilómetros, y el que unirá, a través de un tubo submarino de 455 km Barcelona y Marsella. En total, estiman desde el operador español de la red gasista, Enagás, y a falta de conocer qué subvenciones recibe finalmente, de la planificación del gobierno, de las características técnicas de los proyectos, de qué porcentaje de la red de infraestructuras actual es reutilizable (calculan que hasta un 80%), la construcción de toda la infraestructura necesaria para lograr que el hidrógeno verde llegue desde la península ibérica al resto de Europa necesitaría una inversión total de 4.670 millones de euros.
“El H2Med tiene una estimación de inversión total de 2500 millones de euros, 2.135 corresponden al BarMar, el porcentaje que se asigne a cada uno de los promotores está aún por definir; en el caso del CelZa, el tramo que une Celorico da Beira y Zamora ya está establecido un coste de aproximadamente 350 millones, al lado español le corresponden 157” explicó el Consejero Delegado de Enagás, Arturo Gonzalo, en unas jornadas sobre el hidrógeno celebradas recientemente por la compañía.
¿Cuándo estará listo?
Aunque los plazos no son definitivos, tanto el Ejecutivo como el operador del sistema confían en que el hidroducto esté plenamente operativo –y exportando gas- para 2030. Según las estimaciones de la propia ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ahora el proyecto tiene que pasar “por un proceso de reconocimiento formal por parte de la Comisión Europea de ese interés comunitario, lo que activa una cierta financiación europea y esto lleva su tiempo: en 2023 la Comisión nos dirá si se trata de un proyecto de interés comunitario —creemos que así será—, en 2024 contaremos con los recursos financieros e inmediatamente después —mientras hemos estado preparando todo el trabajo técnico para que pueda hacerse muy rápidamente— se iniciarán esas obras que nos permitan estar interconectados seguramente más en ese horizonte 2028-2029, que no 2025-2026". A lo sumo, estiman desde el Gobierno, en el año 2030 el hidroducto ya tendría que estar en funcionamiento.
Ejes del corredor del hidrógeno verde en España
¿Qué valor diferencial aportará el H2Med?
Como el gas natural, cuando el hidrógeno verde esté plenamente desarrollado, explican los expertos, será una tecnología que ofrecerá seguridad de suministro energético pero, en este caso, sin generar emisiones como sí lo hacen los combustibles fósiles -como el gas natural o el carbón- y supone un impulso a la autonomía energética pues se trata de un recurso que no es necesario importar de otros países porque se podrá producir aquí a través de la hidrólisis de la energías limpias, como la solar o la eólica, para luego ser utilizado en diversos usos finales.
“Este hidrógeno puede ser utilizado de una manera energética, como un combustible, lo podemos utilizar para sustituir el gas natural, el carbón, la gasolina, y puede ser utilizado en transporte, en el hogar, en sector industrial, más aún, puede ser una manera de gestionar y de almacenar la energía renovable” explica Javier Brey, presidente de la Asociación Española del Hidrógeno (AeH2). Una clave, esta última, que es especialmente relevante, según Rafael Riquelme, que subraya que “si dejo de generar energía eléctrica a partir de viento ese viento se pierde y no se vuelve a recuperar, entonces el hidrógeno es una forma de aprovechar esa energía y, como nos vamos a basar, sobre todo en España, que tenemos mucho potencial para ello, nuestro futuro desarrollo energético en fuentes de energía renovables y como el almacenamiento es escaso y caro, una buena alternativa es invertir en hidrógeno y llegar a ser líderes en producción de hidrógeno verde” apunta Rafael Riquelme, Vocal de la Comisión de Energía del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Madrid (COIIM).
De hecho, la Unión Europea se ha fijado como objetivo que en el año 2030 Europa produzca 10 millones de toneladas anuales de hidrógeno verde: España estaría en disposición de producir un 20% de ese volumen, según defienden desde Enagás, es decir, entre dos y tres millones de toneladas en 2030, que se podría ampliar hasta los cuatro millones de toneladas en 2040. Volúmenes a los que se sumarían las 750.000 toneladas anuales que también se podrían importar desde Portugal para su distribución por el resto del continente, y que cubrirían sobradamente las necesidades de nuestro país. “En cuanto a la demanda, estimamos que para 2030, podemos tener una demanda de hidrógeno renovable de aproximadamente 1,3 millones de toneladas, necesitaremos dos millones de toneladas más para exportar por el BarMar y hemos identificado una estimación de 450.000 toneladas / año de exportación por los puertos, por los proyectos de conexiones marítimas” apunta Gonzalo.
