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EEUU demanda a Google por ejercer el monopolio en la publicidad digital

Las autoridades estadounidenses han pedido a la Justicia que obligue al gigante tecnológico a vender o cerrar su negocio publicitario

Página de inicio del buscador Google / NurPhoto

Madrid

El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha formalizado este martes una denuncia contra el gigante tecnológico Google por prácticas monopolísticas en el sector de la publicidad. La decisión judicial se ha traducido en una reclamación dirigida al Tribunal del Distrito Este de Virginia para que obliga a la empresa multinacional a echar el cierre de parte de su negocio publicitario.

La demanda partió del propio Departamento de Justicia, pero a la acción judicial se han personado los Estados de Virginia, California, Colorado, Connecticut, Nueva Jersey, Nueva York, Rhode Island y Tennesse. Los demandantes han asegurado que "la competencia en el espacio de tecnología publicitaria está rota" como consecuencia de acciones de Google que "no han sido accidentales ni inevitables".

Así, han acusado a la compañía con sede en Sillicon Valley de corromper "la competencia legítima de la industria de tecnología publicitaria" al haber participado en "una campaña sistemática para tomar el control de una amplia gama de herramientas de alta tecnología usadas por editores, anunciantes y corredores para facilitar la publicidad digital". Las Fiscalías de estos Estados norteamericanos han denunciado que Google se ha quedado con al menos el 30% de las campañas que crean los anunciantes en los sitios webs de los editores utilizando la tecnología publicitaria que ofrecen.

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Por ello, las autoridades de EEUU han pedido a la Justicia que obligue a Google a deshacerse de su filial publicitaria, Google Ad Manager, de su servidor publicitario, de la gama de herramientas Doble Click y de la plataforma de compraventa de anuncios Adx. Esta es la segunda vez que el Departamento de Justicia presenta cargos contra la tecnológica. En 2020, el organismo emprendió un proceso judicial contra Google por ejercer prácticas monopolísticas para mantener su dominio en el sector de las búsquedas en Internet, así como en la publicidad que acompaña a estas búsquedas.