El Chelsea vuelve a romper el mercado de fichajes: ¡rozan los 500 millones gastados!
Malo Gusto, procedente del Olympique de Lyon, ha sido el último fichaje de los Blues en la 'era Boehly'
Ya venía siendo un habitual en las listas de gasto en el mercado de fichajes desde la llegada de Abramovich, pero Todd Boehly se ha propuesto romper todas las gráficas vistas con 'su' Chelsea. Desde que llegó este verano, son prácticamente 500 millones de euros en fichajes. De estos, 178 millones se han gastado en esta ventana invernal, siendo un gasto mayor que el que suman LaLiga, Bundesliga, Serie A y Ligue 1. Una auténtica barbaridad sin precedentes, vaya.
El último en incorporarse ha sido el prometedor lateral derecho Malo Gusto. Venía siendo uno de los jugadores más agendados en el Olympique de Lyon, llevándose el gato al agua los londinenses a cambio de 30 millones de euros. Eso sí, el francés de raíces portuguesas no llegará a Stamford Bridge hasta el próximo verano, quedándose en su club hasta el final de la presente temporada. No está mal, de todas formas, el precio a pagar por un futbolista valorado en 15 millones de euros, según Transfermarkt.
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Hace dos temporadas, los Blues ganaban su segunda Copa de Europa bajo los mandos de Thomas Tuchel. Ese triunfo abría la puerta a continuar con el proyecto del alemán, ya que era uno de los equipos más sólidos de la Premier League pese a vivir a la sombra de Manchester City y Liverpool. Pese a ello, la invasión rusa de Ucrania provocó la salida de Roman Abramovich del club (y de Inglaterra, de paso), dejando al club con un vacío de poder. Ahí apareció Todd Boehly, magnate estadounidense. Sabía que tenía que llenar un hueco muy difícil de ocupar, puesto que el oligarca ruso cambió la historia del Chelsea. De primeras, en verano, marcó territorio: Raheem Sterling, Wesley Fofana y Marc Cucurella legaron como cabezas de cartel en un mercado para el recuerdo.
La plantilla estaba diseñada para Tuchel, pero Boehly quería seguir reformando el club. Se dice que no le gustó la negativa del alemán de no fichar a Cristiano Ronaldo, esperando a que llegase una mala racha para quitarle de la ecuación. No le tembló el pulso, buscando en el mercado a Graham Potter. El inglés era uno de los entrenadores más cotizados por su trabajo en el Brighton, y el estadounidense no dudó en echarle el lazo. Lo consiguió, creyendo en el proyecto que podía formar. Pese a ello, no acaba de arrancar, estando el Chelsea hundido en la media tabla a mitad de temporada. Por ello, ha llegado la nueva tanda de fichajes en invierno, tratando de esconder todos los problemas de un club que, por el momento, no parece tener claro su rumbo.
¿Por qué Graham Potter?
Víctor Diéguez
Periodista según la UCM. Pasión por el deporte...