El secretario de estado de EEUU, Antony Blinken, viaja a Israel para pedir a Netanyahu el fin de la violencia en la zona
Blinken pidió a Israel y Palestina tomar medidas urgentes para acabar con los enfrentamientos en Jersulén y Cisjordian que han dejado 32 muertos en un enero
Madrid
El secretario de estado de Estados Unidos, Antony Blinken, viajó este lunes a Israel para reunirse con el primer ministro del país, Benjamín Netanyahu,y pidió desescalar la espiral de violencia que vienen registrándose desde hace días y que ha dejado una treintena de muertos en Jerusalén y Cisjordania. Blinken ha instado al Ejecutivo israelí y las autoridades palestinas a tomar "medidas urgentes para restablecer la calma y desescalar".
De igual forma, la autoridad de EEUU ha aprovechado para reiterar ante Netanyahu la necesidad de preservar las condiciones para lograr alcanzar un acuerdo definitivo en el conflicto que mantienen Israel y Palestina con la creación de dos Estados. Durante su visita de dos días, Blinken buscará además ampliar las asociaciones económicas y el fomento de la seguridad bilaterales con el país. Asimismo, se reunirá con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina para tratar de que recuperen palestinos e israelíes la cooperación en materia de seguridad después de que fuera suspendida tras los episodios violentos de los pasados días.
Este mismo lunes el ejército israelí ha matado a un joven palestino, de 26 años, en la ciudad cisjordana de Hebrón, que falleció tras recibir el impacto de una bala en la cabeza. Con esta víctima ya son 35 los palestinos muertos por fuego israelí este 2023. "Es responsabilidad de todos tomar medidas para calmar las tensiones en lugar de exacerbarlas", dijo Blinken a su llegada a Israel.
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El gobierno israelí cambiará la ley para restituir en el cargo al ministro ultraortodoxo condenado por fraude
La coalición gubernamental de Israel, la más derechista de su historia, presentará una enmienda de la Ley Básica que impedirá la revisión judicial de los nombramientos ministeriales, lo que permitiría al primer ministro, Benjamin Netanyahu, volver a nombrar como titular del Interior y Sanidad al líder de Shas, Aryeh Deri, descalificado por el Tribunal Supremo tras haber sido condenado por fraude fiscal. El gobierno defiende con ello la idea de que el nombramiento y cese de ministros no debe estar sujeto a la decisión de los tribunales ya que sostienen que crea "inseguridad sobre el cumplimiento de los deseos de los votantes".
La propuesta de la coalición recoge que "no habrá revisión judicial en ningún nivel de los tribunales sobre ningún asunto conectado con, o que derive de, el nombramiento de un ministro para retirarle del cargo", al margen de que el nombramiento cumpla o no las condiciones que establece la Ley Básica y que inhabilita para el desempeño de un cargo ministerial a aquellos que tengan un historial delictivo a sus espaldas.