¿Pensará Moreno Bonilla que somos tontos?

Es viernes, por delante, un fin de semana, otra vez, sin lluvias importantes. Vamos a tener que cambiar nuestros parámetros. El buen tiempo que siempre esperamos cuando tenemos días libres y que, generalmente, queremos que se traduzca en sol y buenas temperaturas, tiene que ser, a partir de ahora, agua. La lluvia, como sinónimo de buen tiempo, pero lluvia suficiente para poder paliar los efectos de la sequía que está llevando al campo a una situación límite, que cuestiona el suministro en las zonas tensionadas por el turismo y que amenaza con restricciones si las cosas no cambian.

Más de 120 días sin que haya caído una gota de agua en algunos puntos de España, algunos chubascos dispersos pero del todo insuficientes para paliar los efectos de esta sequía. Y es en este contexto, en el que las administraciones deberían demostrar un grado de preocupación, pero sobre todo de responsabilidad máxima, cuando se pone de actualidad Doñana. La intención del Gobierno andaluz, con mayoría absoluta del Partido Popular, de legalizar los regadíos ilegales en el parque, un parque seco y agonizante. Pero Moreno Bonilla solo ve los votos de los regantes de la zona, de los vecinos afectados y ve la Diputación de Huelva como gran objetivo electoral. El resto le da igual, y Vox, en pugna con el PP por este trozo de pastel, le secunda.

Las amenazas de Europa con multas a España parece que no van con el Gobierno andaluz, tanto que el Ejecutivo de Moreno Bonilla ha enviado una carta a Europa prácticamente diciendo que no entiende qué está pasando porque la iniciativa para tramitar la norma la lleva el Parlamento, no el Ejecutivo, como si en ese Parlamento el PP no tuviera mayoría absoluta. ¿Pensará Moreno Bonilla que en Europa son tontos, pensará que todos somos tontos?

¿Pensará Moreno Bonilla que en Europa son tontos?

No lleva una buena racha el PP, que metido en el lío de Doñana, se pone a apoyar al Gobierno para reformar la ley del 'solo sí es sí'. Algo que debería ser normal en democracia, que los apoyos cambien según cuál sea el tema, que esos apoyos y acuerdos se alcanzaran solo pensando en el interés general. En nuestro país se convierte, esto también, en batalla partidista. Y claro, el PP apoya al Gobierno, primero, supongo que porque cree en la reforma, pero segundo para profundizar en la herida abierta por este motivo en el Gobierno de coalición.

Pero tan poco claro lo tienen que en un mismo día, y solo con horas de diferencia, hay quien dice en el PP, Borja Sémper, que la ley ahora es buena, la misma ley que han criticado del derecho y del revés, y hay quien dice, Moreno Bonilla, que Feijóo ya ha derogado la ley antes de llegar al Gobierno.

Que llueva, por favor, y que corra el agua.