Portugal, 1974

Madrid

Portugal, 1974. Hace casi medio siglo que Portugal protagonizó la Revolución de los Claveles y pasó de una dictadura a una democracia. A España le faltaba todavía un tramo por llegar. El primer presidente de esa nueva etapa fue un general antipático, Antonio Spínola, que llevaba monóculo. Cuentan las leyendas de la época, que el domicilio y el despacho del jefe del Alto Estado español, el general Díaz Alegría, se llenó de monóculos. Se los mandaban los ciudadanos como queriendo decir. Nos enteramos de lo que allí estaba pasando por dos extraordinarios profesionales, Eduardo Barrenechea y Luis Carandell, maestros de más de una generación de periodistas.

Fue la primera vez que muchos españoles pidieron pasaporte y salieron de España para recorrer las calles libres de Lisboa. El politólogo Samuel Huntington señaló que con la Revolución de los Claveles comenzó la tercera ola de transiciones democráticas del siglo XX. Portugal, España, Grecia, América Latina, etcétera. Luego vendrían los países del Telón de Acero y más recientemente, las Primaveras Árabes, en tantos casos frustradas. Ahora contamos esas transiciones en sentido inverso. Qué países caen en la autocracia y no qué países mejoran la calidad de su democracia. En eso consiste la involución.