Sánchez y Feijóo van al desgaste mutuo en el prólogo de una durísima batalla electoral

Quedan ocho meses para las elecciones generales, pero Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo están echando el resto en la campaña de las municipales y autonómicas del 28-M, conscientes del efecto que esos resultados tendrán en el ánimo de los españoles para la siguiente cita. El cara a cara del presidente y el líder de la oposición este martes ha sido todo un indicador de la durísima batalla electoral que queda por delante, con ambos dirigentes entregados a la causa de desgastar al contrario por todo y con todo.

Pedro Sánchez no está obligado a comparecer en la Cámara Alta, pero ha pedido hacerlo por cuarta vez con dos objetivos: seguir marcando la agenda con la vivienda (ha prometido la construcción de 20.000 viviendas en terrenos de Defensa) y calentar su duelo con el líder del PP. "Su salto a la política nacional ha sido un chasco”, le he espetado a Núñez Feijóo, que ha proclamado su propósito de aquí a diciembre: "Derogar el sanchismo".

La proposición de ley que tramita el Parlamento de Andalucía sobre el regadío en Doñana y la reforma del 'solo sí es sí' han sido munición que han intercambiado en un duelo más personal que nunca porque las urnas cada vez están más cerca.