Cuidado con el 'lazo libanés': la Guardia Civil alerta sobre esta técnica recurrente para robarte en el cajero

Madrid

La Guardia Civil ha aprovechado su influencia en redes sociales para alertar a la sociedad sobre el conocido como 'lazo libanés'. Una técnica recurrente, que se lleva a cabo en los cajeros automáticos, mediante la que los estafadores pretenden hacerse con tu tarjeta de crédito y posteriormente con tu dinero sin que te des cuenta. Todo comienza con un proceso previo de ingeniería social mediante el que los estafadores en cuestión seleccionan un cajero determinado para dar el golpe. Por norma general acudirán a última hora de la tarde a cajeros utilizados principalmente por extranjeros, donde bajo su punto de vista conseguirán un bote mayor.

Tras seleccionar el cajero en cuestión, los estafadores instalarán un dispositivo de plástico o de cartulina que simula la ranura en la que se debe introducir la tarjeta de crédito para operar en el cajero. Un simple rectángulo de color metálico al que le atan posteriormente una especie de lazo realizado con cinta magnetoscópica en la parte final del mismo. Todo ello con un objetivo muy concreto: que el cajero reconozca la introducción de una tarjeta y conseguir su recuperación posterior. De esta manera, cuando el cliente en cuestión meta la tarjeta en la ranura, esta quedará completamente atascada.

Así tratan de estafarte

Dado que la víctima no sabrá muy bien cómo actuar ante una situación como esta, los estafadores se aproximarán hasta su posición para ofrecerle ayuda. Después de asegurarle que ellos han tenido el mismo problema en el pasado, los responsables del ataque le recomendarán que se ponga en contacto con el servicio de información del cajero. Todo ello a través de un número de teléfono que, sin embargo, no es el oficial. Tras ponernos en contacto con el mismo seremos atendidos por uno de los cómplices del estafador, quien nos informará acerca de los pasos a seguir para recuperar la tarjeta de crédito.

Durante esta conversación, los estafadores solicitarán a la víctima su clave para que puedan ayudarle a resolver en incidente en cuestión. Pero lo que realmente estarán buscando es conseguir la contraseña para que, cuando la víctima abandone el lugar de los hechos sin la tarjeta, puedan hacerse con el control de la misma. De ahí que aprovechen a atacar principalmente por las tardes/noches, cuando las entidades bancarias suelen estar cerradas. Gracias a ello, contarán con un espacio de tiempo lo suficientemente grande como para realizar todo tipo de compras sin levantar sospechas.

Qué hacer si eres víctima del 'lazo libanés'

En caso de que seas víctima de este tipo de comportamientos anómalos cuando vayas a sacar dinero, ten cuidado. Así lo ha dado a conocer la Guardia Civil a través de su cuenta de Twitter, donde ha recomendado a todas aquellas personas que denuncien cualquier movimiento sospechoso: "Si sospechas, llama al 062 o al 112".

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De esta manera, evitaremos ser víctimas de ataques como este mediante el que los estafadores tratarán de hacerse con nuestra tarjeta de crédito y realizar todo tipo de operaciones a nuestra costa. Un gesto de lo más sencillo que nos evitará más de un disgusto a posteriori.