Zelenski eleva la presión para incorporar a Ucrania en la OTAN y la Alianza lo descarta mientras continúe la guerra con Rusia
La Alianza ha aprobado varias medidas que facilitan el ingreso de Kiev, pero ha evitado invitar al país de forma explícita, lo que ha provocado críticas de Zelenski
Vilna
Los líderes de los países de la OTAN han dado este martes luz verde a varias medidas para promover un mayor acercamiento entre Ucrania y la Alianza, pero han evitado invitar de forma explícita a Kiev a unirse a la organización transatlántica, lo que ha generado críticas del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
En la declaración aprobada en la cumbre que los aliados celebran este martes y miércoles en Vilna, se indica que la OTAN estará "en posición de extender una invitación a Ucrania para unirse a la Alianza cuando los aliados lo acuerden y las condiciones se cumplan".
Así, preguntado en una rueda de prensa por esas condiciones, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha explicado que se refieren a la medida en la que Ucrania ha sido capaz de modernizar las instituciones de defensa y seguridad. También mencionó el fortalecimiento de la gobernanza, incluida la lucha contra la corrupción.
"Estas han sido cuestiones que han sido abordadas en todas las ampliaciones de la OTAN porque queremos buena gobernanza, instituciones de defensa y seguridad modernas y fuerzas armadas interoperables con la OTAN", afirmó. Además, ha añadido que las condiciones también se refieren a una segunda dimensión, en referencia a la invasión rusa de Ucrania. En ese sentido, dijo creer que todos los países de la OTAN están de acuerdo en que, mientras siga la guerra, "no es el momento para convertir a Ucrania en miembro pleno de la Alianza".
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También ha agregado que la importancia de la declaración acordada este martes en Vilna radica en que se plantean "las herramientas para asegurar que Ucrania se acerca a la membresía" y destacó que por primera vez en un comunicado de una cumbre de la OTAN se incluye el término "invitación" como "parte del lenguaje" para hablar de Ucrania y se retira la exigencia del "plan de acción para la adhesión" (MAP, en inglés) para la futura entrada ucraniana.
Zelenski eleva la presión sobre la OTAN
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha asegurado este martes durante un multitudinario discurso en el centro de Vilna, la capital de Lituania, que "la OTAN dará a Ucrania seguridad y Ucrania fortalecerá a la OTAN".
Desde la abarrotada plaza de Lukiski, Zelenski se ha dirigido a los asistentes para felicitarles por demostrar que Vilna es ejemplo del "progreso europeo". "Aquí la gente sabe qué es la seguridad y cómo lograrla", ha dicho en el marco de la cumbre de la OTAN que se está celebrando en la ciudad.
"Estoy agradecido contigo, Vilna, agradecido con todas las ciudades y pueblos de Lituania, y con todos los que apoyaran a Ucrania y dieron refugio al pueblo ucraniano que vino a Lituana para salvarse de las hostilidades", ha apuntado Zelenski, que ha aterrizado este mismo martes en torno a las 15.45 horas (hora local) en el Aeropuerto Internacional de Vilna a bordo del avión presidencial de Polonia desde la ciudad de Rzeszow, ubicada a escasos 70 kilómetros de Ucrania.
Así, ha recalcado que la bandera ucraniana "sigue viva y libre" a pesar de estar "bajo ataque". "La ambición rusa quedará en ruinas", ha sostenido antes de afirmar que países como Lituania "no tendrán que luchar nunca contra los soldados rusos porque no habrá guerra en Europa". "Ucrania protegerá su liberad y la de Europa", ha puntualizado.
"Nadie debe tener que mirar nunca hacia Moscú", ha continuado el presidente ucraniano, que ha destacado que cuenta con su "fe en las decisiones y en sus socios". "Fe en la fuerza de la OTAN, en una OTAN que no dude, que no pierda el tiempo y que no mire atrás", ha añadido. En este sentido, ha matizado que espera que esta fe "se convierta en confianza, confianza en las decisiones que merecemos todos y que todo guerrero, todo ciudadano, toda madre y todo niño espera", ha aseverado.
El plan de acción para la adhesión
En efecto, los mandatarios acordaron simplificar el proceso de la futura adhesión ucraniana a la OTAN, al aceptar eliminar el MAP. Según Stoltenberg, ese paso supone que la adhesión de Ucrania a la OTAN pase de ser un proceso "de dos pasos" a un procedimiento "de uno".
El plan de acción para la adhesión es un programa de la OTAN de asesoramiento, asistencia y apoyo práctico adaptado a las necesidades de los países que desean unirse a la Alianza. Los países que participan en el MAP presentan programas nacionales anuales que cubren aspectos políticos, económicos, de defensa, de seguridad o jurídicos.
Los aliados, asimismo, dieron luz verde a un nuevo programa plurianual que garantice la plena interoperatividad de las fuerzas ucranianas con las de la OTAN. Así, permitirá la transición desde estándares, entrenamiento y doctrinas soviéticas hasta los que tiene la OTAN.
Según Stoltenberg, el plan también ayudará a reconstruir el sector de la seguridad y defensa de Ucrania y a cubrir necesidades "críticas" como combustible, equipos de desminado y suministros médicos. Además, los mandatarios aceptaron elevar el nivel de la relación política mediante la creación del Consejo OTAN-Ucrania, un foro de consulta sobre crisis y toma de decisiones en el que ambas partes participarán como iguales.
En el comunicado aprobado este martes, los jefes de Estado y Gobierno subrayan que el futuro de Ucrania "está en la OTAN". Así, reiteran el compromiso de la cumbre de 2008 celebrada en Bucarest, en la que asumieron que Ucrania "se convertirá en miembro de la OTAN".
"Hoy reconocemos que el camino de Ucrania hacia la plena integración euroatlántica ha ido más allá de la necesidad del plan de acción para la adhesión. Ucrania se ha vuelto cada vez más interoperable y políticamente integrada con la Alianza y ha logrado un progreso sustancial en su camino de reforma", constatan los aliados.
Sin embargo, los acuerdos de los aliados resultaron insuficientes para Zelenski, quien consideró "absurdo" que la Alianza no vaya a dar una fecha de invitación para que su país se adhiera. Preguntado al respecto, Stoltenberg recalcó que los aliados "han decidido hoy un fuerte, unido y positivo mensaje a Ucrania sobre un apoyo duradero, pero también un mensaje positivo sobre el camino hacia la membresía".
Un 2% del PIB en Defensa
Al margen de Ucrania, los mandatarios acordaron un nuevo objetivo de inversión en Defensa, con el que se comprometen a destinar al menos el 2% de su PIB al gasto militar cada año.
En la declaración adoptada, igualmente, recalcan que "en muchos casos" será necesario que los países inviertan más del 2% "para remediar las carencias existentes y satisfacer las necesidades en todos los ámbitos derivadas de un orden de seguridad más disputado". Asimismo, los líderes aprobaron una “nueva generación” de planes de defensa regionales que permitan defender rápidamente “a cualquier aliado que se vea amenazado”.
Además, dieron luz verde a un nuevo plan de acción sobre producción de defensa que pretende acelerar las compras conjuntas, impulsar la interoperabilidad y aumentar la capacidad de producción. En 2024, los líderes de la OTAN celebrarán su cumbre en Washington, la capital estadounidense, mientras que en 2025 el encuentro será en Países Bajos.
Rusia amenaza con usar bombas de racimo si EEUU se las proporciona a Ucrania
Por otro lado, el ministro de Defensa ruso ha advertido este martes de que el ejército ruso no descarta echar mano de bombas de racimo en el campo de batalla si EEUU envía finalmente este polémico armamento al gobierno de Zelenski. Sergei Shoigu ha afirmado que sus soldados se han abstenido de emplear este tipo de munición durante la campaña contra Ucrania, pero que si el ejército de Kiev acaba disponiendo de ellas, estarán "obligados" a utilizarlas.
Además, ha defendido que cuentan con un amplio arsenal de todo tipo de municiones de racimo "mucho más efectivas que las estadounidenses". Esta es la reacción que a nivel militar han tenido desde Moscú después de que la Administración Biden anunciase durante la pasada semana el envío de este tipo de municiones al ejército ucraniano, una decisión duramente criticada por el Kremlin, quienes han llegado a considerarlo un crimen de guerra, y que ha encontrado el rechazo de varios de los países aliados occidentales, como el Reino Unido o España. La OTAN asegura, además, que Rusia usa desde hace tiempo estas bombas de racimo contra civiles y edificios en la guerra, mientras que ellos lo harían para expulsar a los efectivos rusos de algún punto.