Sociedad | Actualidad

"Somos esclavas, nos crean cadenas mentales, pero se puede salir": Marcela, superviviente de la trata de seres humanos

Solo en la Unión Europea hay más de 140.000 mujeres víctimas de redes de trata, la mayoría con fines de explotación sexual. La ONU denuncia que se ha convertido en uno de los negocios lucrativos más importantes del mundo generando más de 3.000 millones de euros al año en los países de la UE

"Somos esclavas, nos crean cadenas mentales, pero se puede salir": Marcela, superviviente de la trata de seres humanos

Madrid

"Cuando eres víctima de trata supone que te han robado la dignidad, nuestra identidad, estamos 24/7 a merced de ellos. Somos esclavas, nos crean cadenas mentales para que tengamos que hacer todo lo que ellos no ordenen y manden". Así recuerda su paso por una red de trata con fines de explotación sexual la que hoy es un espejo en el que se miran las que quieren salir de esas mafias. Se llama Marcela y se define como una "superviviente", una de las mujeres que han conseguido salir de las depredadoras redes de trata en España, gracias a la ayuda de una de las entidades especializadas más reconocidas, APRAMP (Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituida) y que ahora trabaja en ella para ayudar a detectar y proteger a nuevas víctimas.

Más información

Esta organización prefiere hablar de las "personas que han sufrido explotación sexual y trata de seres humanos como titulares de derechos, "supervivientes" en vez de "víctimas" porque este término enfatiza la falta de poder, la pasividad y la vulnerabilidad, negando la capacidad y valentía de las personas para hacer frente a su situación y tomar decisiones sobre su propia vida".

"No sé si la sociedad es consciente, pero sí que creo que no se quiere ver, porque supuestamente este delito afecta a personas extracomunitarias, pero no ven que a través de las nuevas tecnologías, de las redes sociales, están atacando y captando cada vez más a niñas españolas y cuando hablo de niñas son de 13,14,15 años", alerta Marcela, que lleva ya casi dos décadas ayudando a proteger a mujeres y niñas que caen en estas redes de explotación.

Desde hace 18 años trabaja en la Unidad Móvil de APRAMP, compuesto en buena parte por profesionales como ella que antes fueron víctimas de trata, son 54 "supervivientes" de las más de 80 trabajadoras de esta entidad especializada que tiene centros en las comunidades autónomas donde se detectan más entradas y tránsito de víctimas de redes de explotación, en su mayoría con fines sexuales, "no me veo haciendo un trabajo más importante que este. Demostrar a las personas que están siendo víctimas de ese delito que se puede salir, que hay alternativas reales. Soy mediadora, superviviente, referente de todas ellas y con mi ejemplo les demuestro que se puede reconstruir la vida desde cero", explica con entusiasmo Marcela.

"Se tendría que aprobar de una vez por todas una ley integral contra la trata de seres humanos, donde se tipifique el delito, los culpables sean condenados, los puteros que sean puestos en su sitio y no comprando cuerpos cada vez más jóvenes y que las víctimas tuvieran todos sus derechos cubiertos, solo así se podrá recuperar su dignidad" reclama esta joven, que en los 12 últimos está ya integrada en la estructura profesional de la ONG.

"La mayoría son captadas cuando son menores de edad"

Las nuevas tecnologías y las redes sociales han cambiado el perfil de las víctimas que son introducidas en España, ya sea como país de tránsito o destino de estas mujeres. El diagnóstico es el de Rocío Mora, la directora de APRAMP, una de las expertas más reconocidas en la lucha contra la trata, "en la actualidad cambia el perfil porque la demanda de los puteros está cambiando. La mayoría de las mujeres hoy son casi niñas, de Colombia, Paraguay, Rumanía, Perú, Honduras, Nicaragua o Uruguay y estamos hablando de una clara causa, la exclusión social y la discriminación por género. Una desigualdad de género y una feminización de la pobreza, todo basado en la violencia contra las mujeres, en contextos cada vez más complicados, que obliga a muchas mujeres a salir de sus países y enfrentarse a una situación de trata y explotación" detalla la responsable de la ONG.

Según esta veterana activista, es necesario detectar a las mujeres en la edad más temprana posible" porque más de la mitad de las mujeres que encuestamos nos dicen que fueron captadas cuando aún eran niñas" señala Mora, que como todas las entidades insiste en reclamar "una ley integral, un marco jurídico que diera una perspectiva global a todas las comunidades autónomas, para poder dar una vida en libertad y en dignidad" reclama.

Otras entidades, como Cruz Roja, cifran en 1000 las víctimas de trata que atienden de media, cada año, en nuestro país, "esta grave vulneración de derechos humanos está en constante cambio, pero hemos notado un aumento de captación en los entornos digitales. Hay una multiplicidad de agresiones en el contexto machista. Son perfiles muy vulnerables, donde además el factor migratorio influye, los tratantes se aprovechan de la situación de las que se encuentran en sus procesos migratorios en la frontera sur, y por todo ello tenemos que mejorar las leyes para que la detección y protección sea más adecuada, estamos preocupadas por la insuficiencia de recursos y consideramos que para mejorar habría que aprobar la ley integral de trata "reclama Irene Sotelo, de la Unidad de Trata de Personas de Cruz Roja Española.

Como cada 30 de julio, Día Mundial contra la Trata, entidades y supervivientes de las redes reclaman ponerse al lado de las víctimas y exigir a los estados y entidades supranacionales que luchen para erradicar este delito del que solo en Europa son víctimas más de 140000 mujeres según Naciones Unidas que además estima que generan más de 3000 millones de euros, convirtiéndolo en uno de los negocios lucrativos más importantes del mundo junto al tráfico de drogas y al de armas.

Trata de mujeres con fines de explotación sexual