Las lágrimas de 'Los Morancos' tras la expulsión de uno de ellos en 'MasterChef': "Yo no sé caminar solo sin mi hermano en la vida"

Madrid

César Cadaval ha sido el segundo expulsado de MasterChef Celebrity 8. Todo ello como consecuencia de un "conejo crudo" que no se pudieron comer los jueces en la prueba de eliminación, lo que llevaba a Pepe Rodríguez, Jordi Cruz y Samantha Vallejo-Nágera a eliminar al pequeño de Los Morancos y a separarle de su querido Jorge: "Le faltan 20 minutos de cocción". Una decisión que supuso un auténtico golpe emocional tanto para uno como para el otro, quienes deberán seguir caminos distintos a pesar de que están acostumbrados a recorrerlos juntos. Principalmente para César, quien reconocía que no se esperaba una eliminación tan dura a las primeras de cambio.

Dado que estaba bajo de ánimos, Jorge se acercaba hasta su posición para animarle: "No te vengas nunca abajo". Sin embargo, y dado que Jordi Cruz pensaba que le estaba rechazando los cariños a su hermano, el cocinero catalán le preguntaba acerca de su relación con Jorge Cadaval: "¿Siempre le rechazas los cariños a tu hermano?". Algo que llevaba a César Cadaval a reconocer que no sabe caminar solo sin su hermano en la vida. Unas palabras que emocionaban al mayor de Los Morancos y a recordar los momentos más difíciles de su vida y cómo su hermano ha estado siempre a su lado para ayudarle: "Siempre ha estado ahí mi gordito".

"Daría la vida por él todas las veces que me lo pidiera"

A continuación, Jorge Cadaval recordaba que no podían ser más diferentes el uno del otro. No obstante, el cariño que se procesan va por encima de todo ello: "Daría la vida por él todas las veces que me lo pidiera". Un momento de lo más emotivo al que le seguiría otro todavía más emotivo. En el momento de dar a conocer el expulsado, César Cadaval reconocía entre lágrimas que no se esperaba marcharse del programa prácticamente a las primeras de cambio. Unas palabras que también hacían llorar a Toñi Moreno, quien reconocía que iba a echar mucho de menos a su compañero.

Sin embargo, la vida sigue adelante. Por esa misma razón, el jurado enviaba al resto de concursantes a la pasarela y se quedaba con César Cadaval para despedirle por todo lo alto. Tras reunirse con Pepe Rodríguez en el dormitorio, César Cadaval reconocía que le daba mucho coraje marcharse porque no esperaba marcharse tan temprano: "Pensaba que iba a estar más tiempo y que iba a aprender muchas más cosas".

"Es muy duro ver a César echándo una lágrima"

Lamentablemente, su conejo no estaba en condiciones como para ser comestible y el jurado no podía pasar por alto algo así en un programa como MasterChef. Después de hablar con César Cadaval, Pepe Rodríguez le preguntaba a su hermano Jorge qué es lo que iba a hacer ahora sin su hermano. Sin embargo, este era incapaz de articular palabra porque estaba muy emocionado.

Mientras tanto, César le pedía que ganara el concurso por él para posteriormente derrumbarse también al ver llorar a su hermano mayor: "Es muy duro ver a César echando una lágrima en cualquier sitio. Se lo guardo todo siempre muy para dentro. Yo soy más llorón, lo reconozco". De esta manera, Los Morancos se separan hasta nuevo aviso dejando para el recuerdo uno de los momentos más especiales de la historia de MasterChef.