Alemania planea prohibir en 2026 los componentes chinos en redes 5G

Berlín

Según un informe del Ministerio del Interior, los proveedores de telecomunicaciones alemanes se han vuelto fuertemente dependientes de empresas chinas como Huawei o ZTE en la construcción de redes 5G para comunicaciones súper rápidas. Algo que “está en flagrante contradicción con la estrategia de seguridad nacional”. Por ello, quiere prohibir a partir de 2026 el uso de componentes críticos que procedan de China. Los operadores también deberían reducir la proporción de componentes chinos en sus redes RAN y de transporte hasta un máximo del 25% antes de esa fecha.

El objetivo es evitar, aseguran desde Interior, un segundo caso ‘Nordstream’. Hace aproximadamente un año, el 26 de septiembre de 2022, volaron los dos gasoductos del Mar Báltico, sin que todavía esté clara la autoría. El sabotaje supuso un punto de inflexión y un golpe de realidad para la sociedad alemana, que de pronto descubrió su vulnerabilidad en materia energética, así como en otras áreas de infraestructura crítica.

Durante el mandato de Angela Merkel, la Gran Coalición evitó tomar una decisión, pese a que operadores de redes como Telekom, Vodafone y Telefónica instalaron componentes, comparativamente más baratos, de fabricantes chinos como Huawei y ZTE. Pero el Gobierno de Olaf cada vez está más convencido de la necesidad de actuar.

Los planes del Ministerio del Interior, en manos de la socialdemócrata Nancy Faeser, cuentan con el apoyo de Exteriores, con su titular Annalena Baerbock, de Los Verdes, a la cabeza, y recuerdan que la ley china obliga a sus empresas a proporcionar a los cuadros de Pekín toda la información que les soliciten. Los liberales, en cambio, que tienen en su poder la cartera de Infraestructuras, están en contra de una medida tan radical. Deberán adoptar un acuerdo común antes de final de mes, aunque el canciller tendrá la última palabra.

La industria alemana teme una reacción violenta en el mercado chino ante la prohibición y los operadores rápidamente han criticado la propuesta, pues implicaría recurrir a fabricantes europeos con el consiguiente encarecimiento de los costes. Huawei Alemania, por su parte, ha rechazado lo que considera una “politización” de la ciberseguridad en el país.

Actualmente el 59 por ciento de la red 5G alemana está equipada con Huawei y alcanza el cien por cien en el distrito gubernamental de Berlín, según datos de una encuesta de la consultora de telecomunicaciones Strand Consult. Los propios fabricantes aseguran cumplir con todas las garantías, además de superar todas las pruebas técnicas de la Oficina Federal de Seguridad de la Información (BSI). Los servicios de inteligencia alemanes, sin embargo, advierten en numerosas ocasiones contra la ingenuidad hacia China.

El próximo martes se reunirán altos cargos de los gobiernos alemán y chino en Berlín para mantener lo que se conoce como ‘Diálogo de seguridad’, una bilateral que se celebra desde 2016 a instancia de Pekín. Todo indica que será un encuentro muy delicado porque en la agenda aparece precisamente la red móvil 5G, núcleo central del sistema económico alemán.