"Los curas tenían dos tipos de confesión": el testimonio desgarrador de una víctima de abusos sexuales en los jesuitas
"La primera vez tenía entre 6 y 7 años"
Madrid
Salvados ha estrenado este lunes su nueva temporada con el que, sin duda alguna, ha sido uno de los programas más duros desde que comenzara a emitirse allá por 2008. Un reportaje que toca de cerca a su presentador, Gonzo, quien estudió en uno de los colegios señalados por el diario El País en su reportaje sobre los abusos sexuales en los distintos colegios jesuitas. Así lo ha dado a conocer el propio periodista horas antes de su estreno, donde ha hablado acerca de este primer episodio como "un capítulo especial": "El de hoy es, sin duda, el Salvados que más me ha costado hacer porque, por primera vez, soy uno de los protagonistas de la historia que os vamos a contar".
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A lo largo de este capítulo, el periodista ha hablado con sus antiguos compañeros de colegio para conocer su punto de vista sobre este caso. También con algunas profesoras que impartieron clase en el centro por aquel entonces e incluso con el responsable de la Compañía de Jesús, quienes han hablado acerca de cómo vivieron esta época tan oscura y cómo la perciben varias décadas después. Entre todos estos testimonios destaca el de una de víctima de abusos sexuales que ha hablado largo y tendido acerca de cómo eran aquellas situaciones.
"Se presenta como representante de Dios"
En primer lugar, el protagonista de este testimonio le ha pedido a Gonzo que se pusiera en la piel de su hijo: "Piensa en tu hijo, en ese ambiente de colegio con nueve años y que, de repente, tu hijo sea tímido y que haya dos tipos de confesión de los curas. Que a algunos niños los lleven al confesionario y a otros los metan en la ofician del cura". Todo ello para, a continuación, ponerle en situación de lo que vivió él cuando tan solo era un niño. El que fuera compañero de Gonzo en el pasado recordaba que el mismo cura que te pegaba una bofetada fuera del despacho se convertía en la persona más dulce del mundo cuando estaba dentro del mismo: "Se presenta como representante de Dios".
Recuerda que en ese momento estaba relajado y tranquilo, por lo que le ha pedido a Gonzo que imaginara a su hijo en esa misma situación para contarle a continuación lo que le hacía: "De repente, el cura empieza a acercarse. Imagínate que tu hijo empieza a sentir el calor del cuerpo de del cura. A olerle el aliento, a oler el sebo de su nariz. Y que ese cura empieza a tocarle a tu hijo una pierna y acariciarle la pierna y que luego esa mano se empieza a meter hacia la entrepierna". Después de este momento tan duro, Gonzo se ha interesado acerca de estas confesiones.
"La primera vez tenía entre 6 y 7 años"
Después de reconocer que apenas tenía entre 6 y 7 años cuando asistió a aquella primera "confesión especial", el protagonista de esta historia recuerda cómo eran aquellas reuniones: "Notabas su mano cerca y te hablaba muy suave, al oído, y tú ahí te sentías como si estuvieras hablando con Dios. No sabías si estabas allí cinco o 15 minutos. No sabías lo que estaba pasando. Te sentías como en éxtasis porque estabas comunicándote con Dios por medio del representante de Dios".
El alumno recuerda que, por aquel entonces, vivía aquellos momentos como maravillosos porque eran amor y cariño: "Era como los besitos que te da tu madre o sus abrazos. Yo no veía diferencia. En mi casa no había violencia. Mi madre era una madre maravillosa, cariñosa y cuando un cura te daba el mismo cariño te sentías bien. Para mí lo que ocurría era muy bonito". Algo que ha llevado a Gonzo a preguntarle cómo los vive en la actualidad. A pesar de que reconoce que lo bloquea siempre que puede, explica que todo se queda en el subconsciente: "Obviamente el recuerdo lo tienes, el olor del sebo de la nariz del cura, el pantalón de Tergal del cura de color gris y cómo mi mano iba al pantalón. ¿Qué hacía yo tocando el pantalón del cura?". Un proceso que se repitió durante aproximadamente dos años, cuando el niño abandonó aquel confesionario especial para ir junto al resto de compañeros a la capilla para confesarse.
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...