Récord sobre récord. La carrera de Bad Bunny/ Benito, tal y como aparece escrito en su útimo disco, no conoce límite. «Un verano sin ti» se convirtió en el álbum más escuchado de Spotify tras superar a Ed Sheeran con «Divide». Y en 2022 volvió a ser, por tercer año consecutivo, el artista más escuchado del mundo, con un total de 18.300 millones reproducciones. El rey del streaming lo llamó Spotify. Taylor Swift se situó en segunda posición por «Midnights», seguida de Drake y The Weeknd. Bad Bunny acumula 76,9 millones de reproducciones al mes. «Nadie sabe lo que va a pasar mañana» es el título del último disco del puertorriqueño, que fiel a su actividad prolífica, contiene 22 canciones que se prolongan durante una hora y 21 minutos: «A los que me aman los amo mucho... a los que me odian los amo más 🫶🏻 NADIE SABE LO QUE VA A PASAR MAÑANA 🐎 No lo escuchen, disfrútenlo, esto es pa ustedes», ha escrito en sus redes sociales. Lo cierto es que las canciones de Bad Bunny se alejan en este disco de lo más comercial y caben hasta violines y pianos en estado puro. MONACO propone un arranque clásico y en otro de los momentos rescata a Aznavour cantando clásicos. ‘WHERE SHE GOES’ y ‘UN PREVIEW’ fueron los primeros sencillos del disco y visto lo visto son poco representativos del resto del álbum. «NADIE SABE» es el primero de los temas del disco, que sirve a Bad Bunny para hacer toda una declaración de intenciones durante los algo más de seis minutos que dura. Sin complejos rapea frases como las siguientes: Sentirsе solo con cien mil personas al frentе / Que de ti hable toda la gente sin saber un bicho, sin conocerte / Y hasta te deseen la muerte”. Y continúa en otro momento: “Hace tiempo no veo a mi terapista / Quizá por eso es que tengo la mente bizca / Este disco no es para ser tocado en un millón de vistas/ Es para que mis fans reales estén contentos, aunque yo por dentro no me sienta al cien por ciento / Es para que me cancelen y me odien”. En la canción LOS PITS se acuerda de Shakira y parafrasea el «Las mujeres no lloran, las mujeres facturan» por “Ahora los hombres lloran, sí, pero sin parar de facturar”. Con BATICANO además del juego de escribir Vaticano con B, lanza frases como «Dios mío, perdóname porque otra vez pequé» mientras que en el arranque se quita la presión cantando: «Tal vez mi música no sea sana, pero yo no me inventé el sexo ni la marihuna». En PERRO NEGRO llega algo de perreo que continúa en ‘UN PREVIEW’, precisamente la última canción del disco. No sabemos si previa del siguiente que puede ya tenga en mente.