«Sorprendida con todo lo que ha pasado», Aitana ha asistido este martes a la cena de nominados de Los40 Music Awards en medio de un gran expectación por las recientes críticas en torno al tono más sensual de su tercer disco, Alpha, así como de la gira en la que lo presenta. «Esta es una polémica que nunca tendría que haber existido», ha declarado ante la prensa en la alfombra roja de esta tradicional velada celebrada en Madrid y en la que se desvelará a lo largo de la noche si ella es una de las grandes candidatas de estos premios, que se entregarán el 3 de noviembre también en la capital. Aitana ha considerado que este tipo de hechos «demuestra cómo está la sociedad actual». «Me da un poco de miedo, pero al mismo tiempo ha salido mucha gente a defenderme hasta el punto de que yo no he tenido que salir a decir nada», ha destacado. «Estoy muy feliz; al final mis fans han llenado todos mis conciertos, escuchan mi música y me siguen en este camino», ha reflexionado la artista, que tiene un gran predicamento entre el público más joven. Frente a esos padres que se sintieron molestos por el componente más sexual de algunas de las coreografías de esta gira, la intérprete de Los Ángeles se ha limitado a decir que no es ella nadie para opinar «cómo se tiene que educar a un hijo». Una de sus defensoras más fervientes en este sentido ha sido su excompañera en OT2017, Lola Índigo, quien ha citado el agravio comparativo de que hace unos años todo el mundo bailara y cantara sin problema «hasta en comuniones» un tema como Pepas de Farruko, cuya letra dice: «To el mundo en pastilla en la discoteca». «¿Podemos hacer apología de las drogas y de la violencia pero no expresar libremente nuestra sexualidad, que es lo más natural del mundo? Siendo sexy no ha ofendido a nadie», ha argumentado la granadina en esta cena de nominados a la que han asistido otras figuras como Chenoa, Ana Mena, Álvaro de Luna, Abraham Mateo, Chanel o Marc Seguí, entre otros.