Zahara recuerda su concierto más difícil en Toledo: "Lo viví con pánico, porque yo tenía un miedo irracional, que es lo que consiguieron ellos"

Madrid

No todo en Hora Veintipico consiste en hablar de política, y Héctor de Miguel está dispuesto a demostrarlo. Qué mejor persona para no hablar de política que Zahara. La artista española ha lanzado recientemente su último sencillo, 'ESTO NO ES UNA CANCIÓN POLÍTICA', junto a su documental 'Esto no es un documental'. Nada es lo que parece. Ha repasado en el programa su evolución en los últimos años, las polémicas acontecidas y su trayectoria en la música electrónica, entre otros asuntos.

¿Por qué un título como ese para una canción? ¿Qué ha llevado a Zahara a coger ese camino? Con ayuda del humor y el sarcasmo, ha respondido: "El mal, ha ganado el mal. Creo que tenían razón y que hay que no meterse en berenjenales. hay que hacer canciones que no ofendan y no molesten". No obstante, también ha aprovechado para ponerse seria y dejar clara su forma de crear música: "Somos seres sociales, seres políticos. Yo me levanto con pensamientos y mis canciones son mis propios vómitos. Entonces, ¿qué esperan que haga? A mí me nace, no tengo una voluntad. Me pasan cosas, las reprimo de alguna manera y cuando me explotan, en vez de quemar contenedores, hago canciones".

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Del acoso al miedo. Del miedo a la terapia

Otro de los acontecimientos narrados en 'Esto no es un documental' es la polémica sufrida en 2021. Durante su gira promocionando su disco 'Puta', la artista recibió multitud de críticas en redes sociales tras anunciarse un concierto en Toledo a través de un cartel en el que se le aprecia ataviada como una Virgen con una banda en la que se puede leer la palabra 'Puta'. Tras las declaraciones de María de los Ángeles Ramos, portavoz de Vox en el ayuntamiento de Toledo, que afirmaba que dicho cartel era "una ofensa a la Virgen", Zahara comenzó su particular odisea de acoso en internet: "Yo ese concierto lo viví con pánico, porque yo tenía un miedo irracional, que es lo que consiguieron ellos. Estaba recibiendo amenazas directamente ya en mi teléfono, no en mí, en mi manera de comunicarme con el mundo. Me había sentido completamente expuesta de una manera súper violenta y el miedo que yo sufrí fue real. No podía comer, tenía un malestar de no querer estar sola, me tenían que acompañar todo el rato y tuve que volver a terapia".

También ha aprovechado para explicar el por qué de ese cartel: "Que tuviera esa referencia religiosa era precisamente por la presión con la que vivimos las mujeres, con la exigencia por ser perfectas, por ser unas santas, por no ser unas putas, pero luego que se nos llame putas era esa contradicción con la que sufrimos de ese ataque continuo. La ofensa era que me habían ofendido a mi durante toda mi puta vida. Muchos años con el peso del insulto sobre mí".

La bestia Merichane

'Hoy la bestia cena en casa' es otro de los grande temas de Zahara que también vino acompañada de cierto revuelo por la sutil referencia al partido político Ciudadanos y su postura respecto de la gestación subrogada: "Para mí, que existiera un partido político que abiertamente estuviera a favor de esto me generaba mucha ansiedad. Los políticos tienen que defender a la ciudadanía, y yo siempre he pensado que hay un mínimo de pensar en el ser humano y esto me parece ir en contra del humano". Ha finalizado su discurso con una tajante declaración: "Se trata de un abuso a las mujeres desde un lugar sin ningún tipo de vergüenza. Eso es decir que no te importan".

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Como la Santísima Trinidad, queda 'Merichane', uno de sus temas más emotivos con un desagradable contexto. El título también es el apodo que recibía Zahara en el colegio, el mismo que tenía una prostituta de su pueblo. Cuando lo descubrió, lo comprendió todo. En 'Esto no es un documental' tratan este asunto desde un punto más familiar: su madre: "Este disco nos ha llevado muchas conversaciones con mis padres, y hay cosas que siguen siendo dolorosas de hablar. Nos ha permitido conocernos y le conté a mi madre que había encontrado esta vía para contarlo porque había cosas que no habría podido contarle a la cara jamás".