Reed Brody llama al TPI a acabar con décadas de silencio frente al apartheid palestino
El abogado recuerda que, por despreciables y terroristas que fueran los ataques de Hamás del 7 de octubre, “vienen de décadas de ocupación asfixiante”
Raji Sourani, director del Centro Palestino de Derechos Humanos en Gaza, se negó a abandonar la ciudad ante la advertencia israelí y eso le ha costado perder su casa, bombardeada esta semana. Ha pasado las últimas tres décadas ignorando las amenazas de Israel y usando el Derecho para abordar los crímenes contra su pueblo. Así lo define su amigo Reed Brody, abogado defensor de los derechos humanos.
“Dijo: estoy aquí como un olivo. No voy a abandonar mi patria”. Al empezar a caer las bombas dudó de si había tomado la decisión correcta, cuenta Brody, que lleva varios días sin poder localizarlo.
'Cuando Goliat metió a David en la cárcel para amedrentarle'
Más información
Sourani ha jugado un papel clave para alcanzar la paz en Oriente Próximo. Brody le recuerda a su lado hace unos años en el Tribunal de la Haya, cuando “miró a los ojos a la entonces fiscal del Tribunal Penal Internacional, y le suplicó que dijera a los palestinos que podían confiar en el derecho internacional y que no necesitaban recurrir a la violencia”. Sin embargo, desde 2015 el TPI no ha avanzado en su investigación sobre las décadas de apartheid y asentamientos ilegales en territorio palestino.
En la guerra desatada por el ataque de Hamás el 7 de octubre y la indiscriminada respuesta de Israel, Brody señala “un tercer tiempo de vulneración del derecho”, que es el referido a las décadas de silencio sobre la opresión y la deslegitimación de los esfuerzos de los activistas que, como Raji Sourani, han defendido la vía diplomática. El abogado cita al Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, cuando tras los ataques del 7 de octubre, dijo que por despreciables, criminales, y terroristas que fueran, “no vienen de la nada, sino de 56 años de ocupación asfixiante”.
Pese a la ausencia de avances por parte del Tribunal Penal Internacional para condenar el apartheid y los asentamientos ilegales que sufren los palestinos, Reed Brody guarda la esperanza de que el nuevo Fiscal de la Corte Penal Internacional Karim Khan investigue esas atrocidades. “Vamos a darle una oportunidad. Lo que ocurre ahora son crímenes de indiscriminación o de proporcionalidad que hay que examinar. No se puede decir fríamente que eso es un crimen de guerra”.
Khan lanzó un primer mensaje describiendo como crimen el ataque de Hamás pero, mientras que Palestina es miembro del Tribunal Penal de La Haya desde el año 2015, Israel no reconoce su competencia, e incluso el propio Benjamin Netanyahu lo ha calificado de antisemita. Para el abogado Reed Brody es todo lo contrario, “el trato del TPI con Israel ha sido muy indulgente”. Sin embargo, su ausencia no tiene muchas consecuencias: “los crímenes cometidos eventualmente por ciudadanos palestinos son de la jurisdicción de la Corte, como también lo son los cometidos en el territorio de Palestina”, explica. Con que el TPI abarca todos los aspectos del conflicto.
Para Brody, hijo de un judío húngaro víctima de los campos de trabajo forzoso, la solución al conflicto pasa por gente como Raji Sourani. “Estamos viviendo un momento de pesimismo. Israel puede aniquilar toda la Franja de Gaza, pero eso no va a ayudar a la seguridad del pueblo de Israel”.