Hora 25El análisis de Xavier Vidal-Folch
Opinión

Feijóo blanquea a Vox

"No se solidarizó con los 30 agentes heridos: al revés dijo que los uniformados maltrataron a los manifestantes. No lamentó el asedio a la sede central del PSOE de manifestantes violentos ni de otros que también incumplieron la ley, como Esperanza Aguirre"

El análisis de Xavier Vidal-Folch | Feijóo blanquea a Vox

Madrid

El líder de Vox llamó ayer al mediodía, a los policías a la desobediencia y a la insurgencia. “Pedimos a la policía que no cumpla órdenes ilegales”, como si fuera él, Santiago Abascal, quien pudiera dictaminarlas: son legales todas las órdenes, mientras la justicia no pruebe lo contrario. Sus seguidores lanzaron vallas, bengalas y otros objetos contra las fuerzas del orden. El resultado son 30 policías heridos. Se supone que la fiscalía debería abrir una investigación profunda. Como hicieron en 2019, cuando los que entonces eran radicales dirigentes del “procés” azuzaron a la masa a quemar contenedores, ocupar espacios púbicos y lanzar objetos contra las policías. ¿O es que un ultra con “estelada” no tiene pase y a un ultra con la “gallina” franquista hay que aplaudirle? ¿Ha abierto el juez García Castellón diligencias contra los violentos de Madrid? ¿O se limita a inculpar a los autores de los desórdenes de Barcelona como si fueran terroristas?

Durante todo el día de ayer, Núñez Feijóo se esmeró en no condenar esa violencia. Blanqueó a Vox. No se solidarizó con los 30 agentes heridos: al revés dijo que los uniformados maltrataron a los manifestantes. No lamentó el asedio a la sede central del PSOE de manifestantes violentos ni de otros que también incumplieron la ley, como Esperanza Aguirre.

Con decencia, otros dirigentes del Partido Popular sí condenaron la violencia. Lo hizo el murciano Fernando López Miras, o el andaluz JuanMa Moreno Bonilla. Lo ha hecho hoy Isabel Díaz Ayuso, desbordando otra vez a quien el ministro Félix Bolaños calificó como “líder provisional” de su partido. Y marcándole el paso. Al ratito Feijóo ha obedecido a la presidenta madrileña y ha condenado la violencia. Sí, pero culpando de ella al presidente del Gobierno: acusándole de ser “el principal responsable de lo que está ocurriendo en España”. Y de ser él quien “no condena la violencia”, como si tratase con un alguien que se autolesiona. Tampoco ha roto con su socio por llamar a los policías a rebelarse. Ayuso se muestra a veces menos simple, y casi siempre más lista. Los celos no perdonan.

Xavier Vidal-Folch

Periodista de 'EL PAÍS' donde firma columnas...