El tráiler de 'Inside out 2' desvela las nuevas cuatro emociones de Riley
Pixar estrena el avance de la nueva película que se estrenará en 2024
Fotograma de la película 'Inside out 2'
La película de Pixar 'Inside out', estrenada en 2015, fue un éxito internacional tanto de círtica como de público. Nueve años después llegará la segunda parte. Su protagonista, una preadolescente de 12 años, llamada Riley se ve obligada a mudarse desde Minnesota a San Francisco junto a sus padres. La experiencia trae numerosos cambios en su vida y la adaptación no resulta nada fácil.
La película supone un análisis de cómo influyen las emociones en nuestro comportamiento y resulta una guía rápida sobre los últimos avances de la neurociencia. A lo largo de la cinta, vemos cómo interaccionan dentro de su cerebro Alegría, Tristeza, Ira, Miedo y Asco. Lo ponen todo patas arribas mientras viven mil y una aventuras, que le impulsan un proceso de aprendizaje vital reconocido por todos. ¿Quién no ha sido adolesente?
En esta segunda parte hay nuevas emociones. La primera que se ve en el tráiler es la ansiedad. El director de la película Kelsey Mann, explica que el nuevo personaje promete revolucionar las cosas dentro de la sede central: "Ansiedad es nueva en el equipo, pero no es de las que se quedan en segundo plano. Eso tiene mucho sentido si lo piensas en términos de lo que ocurre dentro de todas nuestras mentes". Las otras emociones que se suman a la fiesta en esta segunda entrega son: Envidia, Vergüenza, Aburrimiento y Ansiedad.
Maya Hawke pone voz a Ansiedad junto a Amy Poehler (Alegría), Phyllis Smith (Tristeza), Lewis Black (Ira), Tony Hale (Miedo), y Liza Lapira (Asco). Dirigida por Kelsey Mann y producida por Mark Nielsen, 'Inside out 2' se estrena solo en cines en verano 2024.
Cuando se estrenó la primera parte, el neurocientífico e investigador del CISC Javier de Felipe explicó en 'Hoy por hoy' que la película es como un documental científico sin que la gente lo sepa". Explicó que del cerebro dependen nuestras emociones y nuestro comportamiento, y apuntaba como necesaria la inteligencia emocional "para sobrevivir en un ambiente que está en constante cambio".
