Crear
"El verbo crear, creado a partir del 'creare' latino, fue transformado por nuestros iletrados antepasados en criar, porque les resultase más fácil o les sonase mejor"

Madrid
Hoy estamos rodeados de creadores en 'La ventana'. O de criadores, porque el verbo crear, creado a partir del 'creare' latino, fue transformado por nuestros iletrados antepasados en criar, porque les resultase más fácil o les sonase mejor, y así apareció en nuestro primer diccionario académico hace tres siglos. Su extensión era tal que los académicos, que también introdujeron entonces el verbo crear, advertían que esa palabra, "aunque más arreglada a su origen latino", se reservaba sólo a erigir a alguien en una nueva dignidad o empleo. De tal manera que creador, ni aparecía en ese primer diccionario, en donde solo encontramos criador. Y como criar, con ese sentido, era "producir algo de la nada", ese atributo se reservaba solo a Dios y sólo a él se le podía llamar Criador, con mayúscula.
Evidentemente, hoy la palabra ha evolucionado. Y aunque se mantiene la acepción de producir algo de la nada, de ahí bebe el creacionismo, hoy el primer sentido es producir algo nuevo, sea una obra literaria, una pieza musical o una nueva terapia. Pero también es dar principio a algo, desde una empresa a una familia, por ejemplo; o dar lugar a algo como consecuencia de una acción, así creamos buen ambiente o el tabaco nos crea adicción. Sin ir más lejos, hoy estamos creando un programa hablando de las creaciones de estos creadores y, metafóricamente, de sus creaturas, una palabra que, aunque hoy suene vulgar, sigue habitando el diccionario como la forma culta con la que referirnos a las criaturas.





