Bob Pop, sobre Pablo Motos: "Hay gente que sabe que si hace un comentario sobre él su puesto peligra"
Adivina quién no va a ir a divertirse al Hormiguero (vale, sí, es Bob Pop)
Razones para seguir en Twitter (ahora X)
Madrid
La semana pasada se hizo viral un comentario de Alfonso Guerra en 'El Hormiguero' en el que explicaba la pena que le daban los humoristas, ahora que no se podían hacer chistes de mariquitas, ni de enanos, ni de nada. Pablo Motos, su anfitrión, le daba la razón y añadía que los humoristas que trabajan con él pasaban más tiempo en sus shows hablando de las cosas de las que no se podían reír que de las que sí podían hacer bromas. Es decir, que lamentaban que hubiera tanta censura.
¿Lamentaban que hubiera censura en uno de los programas más vistos de la televisión en España? Sí, porque determinadas paradojas que son del todo invisibles para quien las enuncia.
No contaban, tal vez, con que un rosario de cómicos, viñetistas, periodistas y hasta políticos, como Javier Padilla, recién nombrado Secretario de Estado, iban a quejarse de que, más peligroso que hacer chistes de homosexuales o de acondroplásicos, era hacerlos sobre el propio Pablo Motos. La mecha la prendió el cómico Facu Díaz explicando en su canal de Twitch que le constaba que muchos compañeros habían recibido amenazas más o menos veladas de empleados de la productora de 'El Hormiguero' después de haber criticado algún aspecto de la actividad del presentador de Atresmedia. "Pablo Motos hace llamadas para pedir explicaciones sobre chistes", afirmó, "y aquí tiene los huevazos gigantescos de decir que no se puede hacer chistes con nada".
La actriz y humorista ha contestado al ex vicepresidente del Gobierno tras las duras críticas que hizo a la profesión durante su visita a 'El Hormiguero'
A lo largo del fin de semana, Bob Pop se dedicó a recopilar en su timeline todos esos testimonios y hoy lunes, en su sección semanal del Hoy por Hoy, explicó que peripecias twitteras como esta, cuando la red se convierte para él en un verdadero parque de atracciones, son una razón principal por la que sigue en "X". No es una sección para hacer amigos precisamente, ha advertido Àngels nada más empezar.
Bob ha explicado que ha sido un chorreo maravilloso, un no parar: la gente ha montado un "#motoos", como un #Metoo pero de Motos. Ha contado que tiene varios amigos periodistas que le escribieron para contarle "cómo Pablo Motos no solo les había recriminado, sino que también había llamado a sus productoras para pedir su cabeza. Y esta gente no lo ha hecho públicamente porque sigue sintiendo que esa amenaza está ahí."
Bob ha continuado explicando que en esta profesión "kamikazes, kamikazes están Facu Díaz, yo y cuatro más." "¡Y a mí que me arrastras!" ha observado Ángels. "Tú eres una diosa, un icono, eres inamovible, una esfinge" ha bromeado Bob. "Yo me agarro a ti. Pero hay mucha gente que es colaboradora en prensa o en tertulias que si hacen un comentario de Motos su asiento peligra. A mí no me van a llamar porque sería hacerme un regalazo. Me dan contenido para dos semanas. Yo ya sé que hay sitios donde yo no voy a poder estar". Bob ha explicado que él solo va a sitios donde le quieren. Àngels ha recordado que la actriz Mónica López se negó a ir al Hormiguero.
Ni odio, ni venganza
Y Bob ha querido dejar claro que todo este lío que se ha armado no es una campaña de odio o envidia contra Pablo Motos, sino un esfuerzo por dejar claro que "esa censura [de la que hablaban Guerra y Motos], primero, no existe, y, segundo, se hace desde otros lugares donde se ejerce el poder y la amenaza. Lo que yo diga en Twitter porque el señor Guerra haga un chiste de maricones no tiene ningún valor, ni siquiera que lo diga aquí porque yo estoy fuera de los lugares de decisión. Pero que Pablo Motos decida llamarte, darte un toque y asustarte... Por ejemplo, Jimina Sabadú, ha escrito hoy un artículo contando que a ella la llamada de Motos sirvió para que no volviera a escribir sobre él hasta hoy, aunque solo fuera por la pereza de volver a recibir otra llamada".
Así ha comenzado la sección de Bob de hoy. Parafraseando la canción de Gloria Estefan: cerrando puertas, y abriendo heridas.
Otros motivos excelentes que ha dado Bob para no abandonar la red antes conocida como Twitter, es disfrutar de la brillantez de Javier Durán, @tortondo: "Una delicia inteligente, divertida, malvada, ideologizada... humor en unas píldoras de cianuro muy bien montadas." Durán es autor de expresiones como "fach and furious", pero tiene para todos. Fue compañero de Bob como subdirector de Late Motiv y coordinador de guion, y, curiosamente, también trabajó con Pablo Motos en una primera época. "Pero se fue a tiempo", malicia Bob.
Por otro lado, la red social antes del pajarito, exige, según Bob, un cierto trabajo de decidir a quién sigues, porque "un buen timeline es un teletipo excelente". Este es el motivo por el que Ángels, por ejemplo, sigue en Twitter: porque al no tener tiempo de leer todos los periódicos todos los días, ahí encuentra una buena selección de artículos y análisis. "Es una buena guía para llegar a cosas a las que si no, no llegarías". Y hay gente en la que siempre puedes confiar, hay gente con una reputación digital muy seria, por ejemplo, quienes recomiendan, al principio de un conflicto armado, a qué reporteros seguir. En este sentido, "X" también sirve para recibir buenas recomendaciones culturales, porque no es solo un lugar donde la gente opina. Bob, por ejemplo, ha descubierto recientemente un libro sobre discapacidad y sexo y tanto le gustó que ha acabado haciendo el prólogo a la segunda edición y lo presenta en diciembre. O las recomendaciones que hace Neira del disco de la semana, "aunque haya algunos que le voy a romper en la cabeza". "Un día de estos haremos un cara a cara Neira-Bob", ha propuesto Àngels.
Bob también necesita seguir en X para saber cómo sigue @rayomcqueer_, la creadora de contenido Carmen Merina, que se ha convertido en la cara de la precariedad del sector servicios. "Y además de un modo muy lúcido, muy tierno, muy salvaje, con un lenguaje propio... ¡es casi nuestra nueva Chiquito! Y además tiene que contarnos su aventura porque la han echado del trabajo. Porque fíjate, qué intuitiva la jefa, que le dijo parece que no estás muy contenta. Y en lugar de darle un sueldo digno, la han despedido". Bob ha llegado a sugerir que la contrate Pablo Motos como creadora de contenido: "lo reventaría todo por dentro".
Un poco como hace todas las semanas el propio Bob, que se ha sorprendido de que él envíe su sección y nadie le llame para decirle: "Oye, esto no lo puedes decir". "Esto no va a pasar", ha zanjado Àngels.
La maldad sin poder también existe
Bob ha seguido explicando que siempre ha entendido "la maldad con poder", porque tiene un fin, sirve para conseguir tus objetivos, es rentable y turbocapitalista. ¿Pero qué pasa con la maldad sin poder? "Bajo un pseudónimo, hacer el mal por hacer el mal, sin mayor objetivo, conseguir que alguien se sienta como una mierda. Eso me parece alucinante. El troll es maldad gratuita, sin objetivo. A veces piensas: mientras lo haga aquí no lo está haciendo en las calles. Pero es que esto también son las calles." Y está bien que Twitter le recuerde esto, según Bob, porque contribuye a sacarle de su burbuja intelectual: "no todo el mundo es tan majo como mis amigos".
La red social también es una cocina de ideas medio crudas, un lugar donde encontrarte con el gran Stephen King, un campo de juegos de odio con criterio contra el poderoso y también el lugar donde Oskar Matute puede apuntarse a comer con Àngels y Bob, a ver si lo desvirtualizan por fin.
Eva Cruz
Redactora en el magazine de 'Hoy por Hoy' desde...