Perro
" Es una palabra de origen incierto. Del latín nos llegó can, que usamos poco, pero nos ha permitido crear palabras como canino o canódromo"
Perro
Madrid
Hace unos días hablamos de la palabra robot, un término con autor conocido. Hoy nos sucede lo contrario, porque perro es una palabra de origen incierto. Del latín nos llegó can, que usamos poco, pero nos ha permitido crear palabras como canino o canódromo. No hace falta explicar lo que un perro, pero sí es llamativo que siendo el mejor amigo del hombre lo hayamos utilizado para nombrar todo tipo de perrerías, empezando por esta. De hecho, la segunda acepción de la palabra ya nombra a toda persona despreciable.
Más información
Así, una existencia precaria es una vida perra, morir de mala manera es hacerlo como un perro, maltratar a alguien es tratarlo como un perro, si hace mal tiempo diremos que es un día de perros, y de quienes mantienen una complicada relación decimos que andan siempre como el perro y el gato. Y, salvo el sabueso, las diferentes razas y condiciones perrunas nos han servido para referirnos a lo peor del alma humana. A la persona sumisa la llamamos perro faldero, al agresivo, dóberman o perro de presa, de un individuo sucio o de baja condición diremos que parece un perro sarnoso o pulgoso, y el femenino perra ha sido usado para nombrar la rabieta infantil o para referirnos a prostitutas y a sus hijos. Y si alguien se llama Pedro y preside un gobierno, una oposición maleducada puede llamarlo perro, Perro Sánchez, ignorando, seguramente, una cuarta acepción , menos usada, que se refiere al hombre tenaz y firme. Cuando lean el diccionario…
Entrenamiento semanal de Bolo, uno de los perros de la Unidad Canina de Rescate del Consorcio Provincial de Bomberos de Córdoba