"Nadie me ha puesto tantas veces en peligro": un joven relata su último viaje en Blablacar y arrasa en redes por todo lo que le pasó

Madrid

Álex Álvarez es una de esas personas que viaja en Blablacar sin fijarse demasiado en las valoraciones de los distintos conductores ni en los comentarios que les haya puesto previamente la comunidad. Todo ello porque es una persona demasiado confiada y porque entiende que todas aquellas personas que ofrecen sus servicios a través de esta plataforma son confiables. A pesar de que por norma general suele ser así, lo que le ha pasado en este último viaje le ha llevado a grabar un vídeo en el que ha pedido a sus seguidores y seguidoras que se fijen muy bien con quién van a viajar antes de subirse al coche.

Un vídeo que se ha popularizado en TikTok, donde ha compartido el que sin duda alguna ha sido el peor viaje de su vida a través de esta plataforma: "Vengo a contaros lo que me pasó en el último Blablacar que cogí para que miréis las valoraciones de la gente, los comentarios y todo este tipo de cosas porque son más importantes de lo que yo me pensaba. Soy una persona muy confiada que no miraba esas cosas y me subía con el primero que venía". Después de hablarnos acerca de la importancia de fijarse bien en las valoraciones, Álex Álvarez nos adentra en un viaje de Barcelona a Granada que duró mucho más de la cuenta.

Un viaje en una "tartana del año de la pera"

A pesar de que el trayecto entre ambas ciudades puede completarse en unas ocho horas y media, Álex y el resto de personas que viajaron con él en el coche no llegaron a su destino hasta 12 horas después de salir de la ciudad condal. La travesía comenzó un 23 de diciembre a las 10.00 horas de la mañana. Después de quedar con la conductora en un punto concreto, el protagonista de este vídeo se subió al vehículo junto al resto de integrantes de un viaje que sin duda alguna nunca olvidará. Desde la conductora y su hija hasta otros dos pasajeros más que también fueron testigos de una aventura sin precedentes.

Álex Álvarez asegura que el coche en el que viajaban era una auténtica "tartana del año de la pera" que no era capaz de alcanzar los 90 kilómetros por hora cada vez que se enfrentaba a una cuesta arriba. Para más inri, tenía el filtro de partículas roto, por lo que iba haciendo un ruido cuanto menos molesto que les acompañó durante todo este viaje que se acabó convirtiendo en una odisea. El joven recuerda que la conductora era una señora francesa de 47 años con la que no se podían comunicar porque ella no sabía inglés y el resto tampoco tenía la soltura necesaria como para hablar en francés.

"No sé cómo nos salvamos"

Partiendo de esta base, la comunicación entre ambas partes fue imposible durante todo el viaje. Pero esto no fue lo más peligroso de la travesía. El protagonista de esta historia recuerda que la conductora no conducía demasiado bien y que puso en riesgo al resto de integrantes del viaje en varias ocasiones. En una de ellas acabó dando un volantazo para no chocarse contra la mediana que separaba la autopista de una de las salidas de la misma: "Yo directamente asumí que nos estrellábamos. Estaba preparado mentalmente para recibir el impacto de la mejor forma posible". Por suerte, la conductora fue capaz de girar en el último segundo para salvarse de un accidente casi seguro: "No sé cómo nos salvamos".

Álex Álvarez recuerda que la conductora era pésima al volante y que el resto de turismos que viajaban por carretera acababan pitándola por sus maniobras. Pero ésta no puso en peligro al resto de integrantes únicamente durante la travesía. También cuando estaban completamente quietos, pues se le olvidó poner el freno de mano a la hora de dejar a uno de los integrantes: "Se bajó a ayudar a otro de los clientes a sacar el equipaje y empiezo a ver que el coche se va hacia atrás".

Quiso recorrer 20 metros marcha atrás en la autopista

El protagonista reconoce que nunca nadie le ha puesto tantas veces en peligro. De hecho, ha asegurado que llegó a pensar que no iba a llegar nunca a su destino: "Estuve más de 12 horas en ese maldito coche y ya era de noche". Algo que también le pasó al resto de pasajeros, quienes llegaron incluso a bajarse antes de tiempo para acabar con el suplicio. Pero lo peor no había llegado todavía. Cuando estaban por Murcia, la conductora se saltó la salida para dejar a uno de sus clientes. Lejos de dar la vuelta o esperar a la siguiente salida, detuvo el vehículo por completo con la intención de recorrer veinte metros marcha atrás y entrar en dicha salida.

Por suerte, Álex Álvarez y el resto de ocupantes del vehículo le hicieron entrar en razón para que no lo hiciera: "Empecé a decirle que no podía hacer eso mientras que ella estaba super tranquila". De esta manera, los integrantes del vehículo consiguieron llegar a su destino de una sola pieza con una historia que jamás olvidarán.