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¿El frío resfría? Un doctor responde a una de las preguntas más repetidas cada invierno

Además, explica el origen de los estornudos, la diferencia entre un resfriado y una gripe, y destaca la necesidad de ventilar las estancias pese a las bajas temperaturas

La gripe no es un resfriado y el frío no provoca tos ni dificultad respiratoria

Madrid

Cada invierno cuando la incidencia de gripe, intentar protegernos de los virus y en ocasiones huimos del frío como si fuera el causante de todos nuestros males. "El frío enfría, no resfría", comienza aclarando el biólogo molecular Diego Arroyo, que ha intentado explicar la contradicción que supone que, por miedo a que una corriente de aire frío provoque un catarro, no se ventilen las estancias, cuando es justamente lo contrario de lo que hay que hacer.

La gripe no es un resfriado

Una de las primeras cosas que quiere dejar claras es la diferencia entre resfriado común y gripe: "El resfriado, la gripe y otras afecciones respiratorias se deben a una infección. El resfriado común está causado por rinovirus, adenovirus, virus parainfluenza, y otros. Hay más de 200 virus diferentes que pueden provocar un resfriado común. La gripe está causada por los virus de la gripe A o B. La gripe no es un resfriado. Es una infección sistémica (afecta a todo el organismo), suele ser más grave, provoca dolores musculares, cefaleas, fiebre alta, etc.". Además detalla algunas bacterias (como Haemophilus inflenzae, Streptococcus pneumoniae o Mycoplasma pneumoniae) que también pueden provocar enfermedades respiratorias e incluso neumonía.

Este especialista aclara que "una gripe suave puede confundirse con un resfriado y generar sólo manifestaciones locales y no sistémica", y que tanto la gripe como el resfriado comparten algunos síntomas como congestión, escalofríos, mucosidad, estornudos, tos, dificultad respiratoria, cefaleas o dolor muscular.

Malas noticias: es casi imposible tanto adquirir inmunidad definitiva

Como biólogo molecular, es un especialista en ADN y ARN y explica que "casi todos los virus respiratorios tienen ARN como material genético, por lo que suelen presentar mucha variabilidad": esto hace que "muten" las proteínas víricas que el sistema inmune utiliza para reconocer el virus y éste no puede protegernos de forma eficaz.

"Es casi imposible tanto adquirir inmunidad definitiva, como desarrollar vacunas eficaces. Hay cientos de agentes infecciosos respiratorios y sus variantes para los que nunca estaremos inmunizados. Sabemos que podemos resfriarnos en cualquier momento, sobre todo en invierno", razona.

¿Por qué estornudamos?

El doctor Diego Arroyo dedica unos párrafos de su hilo de Twitter a hablar de los estornudos. Cuenta que "son un reflejo nervioso provocado por varios factores, principalmente agentes respiratorios irritantes y alergias" y que las infecciones respiratorias irritan "y por tanto provocan estornudos" pero "no obstante, algunos factores que provocan estornudos no están relacionados con la irritación del tejido nasal".

El cambio brusco de temperatura de calor a frío provocado, por ejemplo, por una corriente de aire o entrando en un edificio con aire acondicionado puede provocar estornudos porque el causante de los mismos es el nervio trigémino, "el responsable de la sensibilidad de la cara y de otras zonas del cráneo. Tiene múltiples ramas, sensibles a estímulos químicos, táctiles, dolor y temperatura. Existen ramas en el interior de los conductos nasales".

Arroyo cuenta que "los estornudos provocados por el frío suelen cesar en el momento en que cesa el estímulo (la corriente de aire frío). No se mantienen durante días, ni dejan un resfriado como secuela, salvo que se estuviera incubando previamente". Pone además como ejemplo otros motivos por los que mucha gente estornuda con frecuenta que nada tienen que ver con el frío como son "los estornudos fóticos, que están provocados por luz brillante, como la del sol" o "el estornudo por saciedad (por tener el estómago lleno) o por excitación sexual o tras un orgasmo".

El frío no provoca tos ni dificultad respiratoria

Más allá de los estornudos, hay otras consecuencias del frío que pueden confundirse con síntomas de resfriado o de la gripe. Cuenta, por ejemplo, "generamos moco para proteger el epitelio interno de la nariz del aire frío. Y para calentar el aire exterior antes de que entre en los pulmones, se dilatan los vasos sanguíneos del interior de la nariz aumentando la secreción nasal". También recuerda que el frío "obviamente" genera escalofríos. Pero quiere que quede claro que aunque los cambios de temperatura bruscos generan varias respuestas equivalentes a estar resfriado, "el frío no provoca tos ni dificultad respiratoria".

Entonces, ¿el frío influye en el resfriado?

La pregunta clave es si el frío influye en el resfriado, como comúnmente se cree, o no. Y la respuesta del doctor es contundente: "Si no hay infección, no", aunque añade que "algunos estudios indican que el frío influye indirectamente, facilitando las infecciones respiratorias". Y pasa a explicarlo: "El principal efecto del frío es que compartimos espacios cerrados y mal ventilados, de forma que los aerosoles portadores de agentes infecciosos pasan fácilmente de una persona a otra. Esto se suma a que la gente mantiene un contacto más estrecho".

Además, destaca que "el frío dificulta la función del sistema inmunológico": "Cuando las células inmunes se enfrían son menos efectivas. El principal anticuerpo de la mucosa es la IgA, que a temperatura baja realiza su función con menor eficacia. Con el frío algunos virus, como el de la gripe, se propagan mejor mediante aerosoles, ya que son más estables a baja temperatura, que son condiciones típicas de la meteorología invernal".

Y llega la conclusión final: "Entre enfriarse y resfriarse no hay relación de causa-efecto. Hay coincidencia en los "síntomas", coincidencia en la época del año en que se producen ambas, y tal vez una cierta predisposición inmunológica relacionada con el enfriamiento de las fosas nasales". Sin embargo lamenta que sea "una batalla perdida" convencer a algunas personas de que airear las estancias incluso en invierno (aunque suponga pasar un poco de frío) "es la forma más eficaz de prevenir las infecciones respiratorias".